Hallan tres cepos metálicos prohibidos para la caza en una explotación ganadera de Burgos

En una inspección rutinaria del servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) en una explotación ganadera de la comarca del Arlanza en la provincia de Burgos, los agentes han encontrado tres cepos metálicos considerados prohibidos para la caza porque pueden poner en riesgo la vida de cualquier animal, ya sea salvaje o doméstico, pero también la de cualquier persona que pase por esa zona y desconozca su existencia.

Aunque algo viejos de aspecto y oxidados, estos artilugios no habían sido usados recientemente según el Seprona pero funcionaban perfectamente por lo que solo el mero hecho de estar en posesión de estos artilugios no permitidos para su uso en para la caza y que estén al alcance de cualquiera, ha provocado que la Guardia Civil se haya incautado de ellos además de levantar la correspondiente denuncia al propietario de la explotación ganadera

Según ha informado este jueves la Guardia Civil, la localización de los cepos se produjo como consecuencia de la labor preventiva que desarrolla la Comandancia de la Benemérita de Burgos, a través del Seprona, para el seguimiento y erradicación de prácticas furtivas en la provincia, sobre todo la dirigida hacia el corzo (Capreolus capreolus) cuya mayor incidencia se produce en estas fechas.

Días atrás, una patrulla inspeccionó una instalación ganadera a modo de tenada, con presencia de animales vivos, donde los agentes localizaron a simple vista tres cepos metálicos que aún funcionaban.

La Guardia Civil insiste en recordar que el uso indiscriminado de estos artilugios puede poner en grave riesgo no solo la vida de animales silvestres y domésticos, sino la integridad de las personas que desconocedoras de su existencia, que pueden quedar atrapadas o sufrir lesiones en caso de accionarse los cepos, ya que suelen ser colocados ocultos a la vista y camuflados en pasos de animales