Cataluña

La Generalitat entierra las dudas: las elecciones serán el 14 de febrero

Meritxell Budó asegura que el Govern está trabajando para garantizar la cita electoral

La portavoz del Govern, Meritxell Budó.
La portavoz del Govern, Meritxell Budó.Servicio Ilustrado (Automático)RUBÉN MORENO

“El plan A y el plan B es celebrar las elecciones el 14 de febrero. Para eso estamos trabajando”. Con estas palabras, la portavoz de la Generalitat, Meritxell Budó, ha querido enterrar esta mañana las dudas que se habían sembrado en torno a la cita electoral, aunque también ha advertido de que se deberán celebrar siempre que se cumplan tres objetivos: garantizar la salud garantizar salud del votante y los trabajadores en la jornada electoral, el derecho a voto a todo el mundo independientemente de cuál sea su situación epidemiológica (es decir, esté contagiado o no) y que toda la información llegue a todo el mundo y pueda decidir libremente -en referencia a la campaña electoral-.

De momento, la portavoz de la Generalitat ha evitado dar muchas concreciones. Budó se ha limitado a insistir en que se está trabajando sobre los distintos mecanismos para garantizar la celebración de las elecciones y ha asegurado que en los próximos días esperan poder compartir un documento con todos los detalles con los grupos de la oposición -antes del 22 de diciembre, fecha en que las elecciones quedarían convocadas automáticamente al no haber ninguna investidura-. En las últimas horas se ha abierto, por ejemplo, la posibilidad de que los catalanes puedan votar por correo desde casa -el funcionario de Correos llevaría la documentación a los domicilios-, un escenario que Budó no ha concretado tampoco.

En cualquier caso, el Govern ya ha recibido diversos informes en materia sanitaria y jurídica para la celebración de las elecciones. Asimismo, el Procicat -órgano que se encarga de aprobar las medidas en pandemia- ha diseñado ya un documento sobre los lugares de votación: será, siempre que se pueda, en pabellones que tengan buena ventilación y se han regulado las distancias entre mesas y empleados en la jornada electoral. En los próximos días está previsto que se aprueben dos nuevos documentos: uno sobre la propia jornada electoral y otro sobre la campaña electoral.

Budó también ha rechazado, de entrada, una reforma de la Ley electoral -como propone el Síndic de Greuges- para celebrar las elecciones ya que considera que, de momento, hay cobertura legal suficiente para que se desarrollen sin problemas. Además, ha asegurado de que, en caso de que se tuvieran que suspender las elecciones, se trataría de hacerlo con el máximo consenso con el resto de fuerzas políticas.