El Ayuntamiento de Valencia asumirá las competencias y ejecutará de inmediato el control de las reuniones de más de 50 personas en la ciudad, ante los últimos datos sobre la covid-19 de la Conselleria de Sanidad que advierten de que un 48 por cinto de los nuevos brotes se están produciendo en el ámbito social y familiar.

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, se ha referido así, en declaraciones este viernes a los periodistas tras la Junta de Portavoces, al anuncio ayer de la consellera de Sanidad, Ana Barceló, de que la Conselleria se va a dirigir a todos los ayuntamientos de la Comunitat para solicitar su colaboración en la vigilancia de actos festivos, encuentros o acontecimientos populares que se puedan desarrollar en su ámbito municipal.

“T”nemos recursos limitados pero lo que podamos hacer se hará”, ha manifestado Ribó, quien ha asegurado que el ayuntamiento incidirá “en la medida que pueda” en la vigilancia de estas reuniones.

En la junta se ha informado también hoy de los últimos datos sobre el seguimiento de la covid-19 a través de las aguas residuales de la ciudad, y ha señalado al respecto que los análisis indican una "estabilización y cierta bajada" después del pico importante que se detectó en la ciudad el pasado 20 de julio y que se tradujo después en los contagios que han ido registrándose.

“Cuando hay un pico a los 10 o 15 días se nota en contagios y espero que estos datos a la baja también se noten”, ha señalado el alcalde, quien ha precisado que hay que tener en cuenta el hecho de que muchas personas están abandonando la ciudad para pasar sus vacaciones fuera y se ha detectado ya un aumento de presencia del virus en las aguas residuales de El Perellonet.