Sociedad

Las Cortes valencianas rechazan que la televisión pública emita anuncios en castellano

Los socialistas aseguran que esta medida “no garantiza más ingresos”

El director general de À Punt Mèdia, Alfred Costa, durante la presentación de las principales novedades informativas de la televisión y la radio de À Punt Mèdia para esta temporada
El director general de À Punt Mèdia, Alfred Costa, durante la presentación de las principales novedades informativas de la televisión y la radio de À Punt Mèdia para esta temporadaKai FörsterlingAgencia EFE

La comisión de Radiotelevisión Valenciana de Les Corts ha rechazado, con los votos de los partidos del Botànic y de Vox, una proposición no de ley de Ciudadanos, apoyada por el PP, sobre el contrato programa del ente público À Punt Media 2021-2023 en la que, entre otras cuestiones, se planteaba la posibilidad de insertar anuncios en castellano y en mitad de películas con el fin de aumentar los ingresos.

La propuesta de Ciudadanos, que ha sido defendida por su síndica, Ruth Merino, reclamaba “más realismo” para el contrato programa y más presupuesto destinado a la producción de contenido propio, pero también una atención a las cifras de audiencia e ingresos, que, a su juicio, “están lejos de ser las óptimas”.

Así, pedía que a la hora de realizar contratos externos se tenga en cuenta el éxito de la productora en cuestión en términos de audiencia, porque “la televisión pública no puede ser un banco de pruebas, sino que ha de contar con garantías”.

Por otra parte, apuntaba la posibilidad de realizar cambios en el libro de estilo orientados a permitir la publicidad en castellano o a realizar cortes publicitarios en filmes de menos de 90 minutos porque “en la situación actual no se pueden poner límites a los ingresos publicitarios”.

La socialista Mercedes Caballero ha cuestionado las “garantías” de audiencia que Ciudadanos pretende exigir, porque “un éxito en una producción no lo garantiza en la siguiente” y ha insistido: “no podemos secundar una proposición no de ley en la que habla de introducir publicidad en castellano, eso no garantiza más ingresos”.

Mónica Álvaro, de Compromís, ha reprochado a Ciudadanos que se centre “en los efectos económicos y en los ingresos por publicidad, y ni siquiera nombre los servicios públicos”, al margen de que ha insistido en que “no se puede cambiar a través de una proposición no de ley lo que emana de una ley”.

Estafanía Blanes, de Podem, ha puesto el acento en el “éxito que han tenido las colaboraciones de À Punt con otras televisiones autonómicas” y ha reprochado a Ciudadanos que cuando se habla de “reciprocidad con otros medios de habla catalana Cs y el resto de la derecha se opone”.

Por otra parte, Podem ha rechazado la “manga ancha” en el libro de estilo, porque eso supone “cargarse el espíritu de este espacio audiovisual público”.

La propuesta de Cs únicamente ha contado con el respaldo del PP, que ha expresado sus dudas sobre la conveniencia de interrumpir las películas pero que considera positiva la posibilidad de introducir publicidad en castellano.

Asimismo, el diputado Luis Martínez (PP) ha insistido en la conveniencia de introducir programación taurina porque, según ha asegurado, en Aragón tiene una audiencia del 30 %, en Castilla la Mancha del 21 % y en Andalucía del 18 %.

“No es tan descabellado, ya que en la Comunitat hay tradición, pero aquí prima más el sectarismo y persecución a lo taurino”, ha lamentado Martínez.

El diputado Miguel Pascual, de Vox, ha calificado de “entrañable” el “esfuerzo de Cs por mejorar los chiringuitos del Botànic y hacer el juego a nacionalistas, socialistas y comunistas”; ha considerado que “esos 68 millones de euros que cuesta À Punt, que serán 80 en 2022, vendrían muy bien para ayudar a la gente que de verdad lo está pasando mal” y se ha comprometido a “cerrarla, de la misma forma” que harán, ha dicho, con TV3.

Antes del inicio del debate de la propuesta de Ciudadanos, la presidenta de la comisión ha informado a los presentes de que ni la comparecencia de la presidenta de la Corporación Valenciana de Medios de Comunicación, Mar Iglesias, ni la del director general de la Sociedad Anónima de Medios de Comunicación, Alfred Costa, ambas previstas para este jueves, se iban a poder producir, de modo que han quedado pospuestas al 23 de septiembre.

La suspensión de estas comparecencias ha suscitado una queja por parte del PP, que ha solicitado a la mesa de la comisión el “detalle de los compromisos adquiridos por ambos con anterioridad a la convocatoria, así como la fecha más inmediata en la que podrían comparecer”.

Igualmente, ha hecho constar su “malestar” ante “la falta de interés y respeto mostrada por ambos directivos, al no priorizar su comparecencia en la comisión”.