Alemania redescubre a Sorolla
El Museo Kunsthalle de Múnich acoge la exposición retrospectiva "Sorolla en París"
El Museo Kunsthalle de Múnich acoge la exposición retrospectiva "Sorolla en París".
La obra del pintor valenciano Joaquín Sorolla (1863–1923) se presenta en Alemania por primera vez desde 1907. A partir de este viernes y hasta el 3 de julio, la exposición retrospectiva titulada “Sorolla en París” podrá verse en el Museo Kunsthalle de Múnich, donde serán expuestos 120 trabajos del artista para abarcar toda su trayectoria. Según informó el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, 29 de los 80 lienzos de la muestra proceden del Museo Sorolla de Madrid, que también ha aportado 40 obras adicionales de pequeño formato, llamadas “notas de color”.
La primera exposición del “maestro de la luz” recogida en un museo germano será dividida en cinco secciones y un epílogo: 'Sorolla en el salón', que describe la etapa inicial del artista; 'El mar: el triunfo de la luz y el color', con el mar Mediterráneo como glorioso protagonista; 'Intimidad', un paseo por la etapa más familiar de Sorolla; 'Hijo de Velázquez'; 'Sorolla cosmopolita: elegantes, jardines y paisajes', cuando ya es un artista de fama internacional, y la recopilación 'Estudios, apuntes y notas de color'.
Esta exhibición, tal y como comparte la responsable de comunicación del Museo Sorolla, Covadonga Pitarch. “tiene como objetivo dar a conocer el arte de Sorolla en Alemania, hasta ahora desconocido por diversas causas”. El último acercamiento de la obra del pintor al país fue cuando él mismo presentó sus trabajos, años antes de su muerte.
El genial pintor valenciano fue uno de los artistas españoles más importantes de la transición del siglo XIX al XX y el máximo referente de la corriente luminista española. Las pinceladas de Sorolla rescatan la luz en la mayor parte de su obra, influenciado por pintores impresionistas contemporáneos, como el parisino Claude Monet. El uso de los colores claros y brillantes, la contraposición entre reflejos y sombras, la recreación de escenas de la España de su época y de paisajes marítimos bañados por el sol imperan en su prolífica obra, que comprendió más de 2.000 trabajos.
Gran parte de la carrera de Joaquín Sorolla de desarrolló en París, el centro artístico por excelencia de la época, donde, con sólo 23 años, comenzaría a beber de los influjos impresionistas. Una técnica de calidad, una obra marcada por una gran originalidad estilística un talento único para evocar “los jardines, patios, fuentes y, en general, esa luz particular de España”, según los críticos franceses, le hicieron ganador de varios premios como el Grand Prix de la Exposition Universelle de París en 1900. La modernidad en sus propuestas le otorgó una fama más allá de España o Francia y llamó fuertemente la atención en países como Estados Unidos. Fue uno de los artistas más apreciados de su tiempo y lo sigue siendo actualmente. La muestra de los trabajos de Sorolla expuesta en el Museo del Prado de Madrid en 2009 se convirtió en la exhibición más visitada de toda la historia del museo, superando a las dedicadas a Velázquez o Goya.
Tras su visita a Alemania, la colección “Sorolla en París” se expondrá en el Museé des Impressionismes de Giverny y llegará al Museo Sorolla de Madrid el 16 de noviembre de 2016, donde permanecerá hasta el 15 de marzo de 2017.