Estreno

Corre, Dani Rovira, corre

El actor es Ramón Arroyo, enfermo de esclerosis múltiple, en «100 metros»

Dani Rovira encarna el ejemplo de superación de Arroyo en «100 metros»
Dani Rovira encarna el ejemplo de superación de Arroyo en «100 metros»larazon

El actor es Ramón Arroyo, enfermo de esclerosis múltiple, en «100 metros»

La historia de Ramón Arroyo es una de las que dejan huella. A pesar de convivir con una enfermedad tan devastadora como la esclerosis múltiple, ha podido hacer lo que todo el mundo dijo que no podría: correr un Ironman (una de las pruebas deportivas más duras que existen en el mundo). Ahora, Dani Rovira encarna el ejemplo de superación de Arroyo en «100 metros», la primera ficción en la gran pantalla de Marcel Barrena.

En la preparación del papel, el malagueño convivió con Ramón en su día a día, y lo califica de «incertidumbre constante». «Su vida es acostumbrarse a tener un cuchillo encima de ti que no sabes cuando va a caer, puede que mañana o puede que en cinco años», comenta Rovira durante la presentación de la cinta. La llamada «enfermedad de las mil caras» supone un cambio drástico en la vida del paciente, que tiene que estar alerta para evitar los brotes. «Como dice Bruno Bergonzini, el único de los actores que padecía la enfermedad, en la película, la esclerosis es como una mala compañera de baile, solo tienes que estar atento a que no te pise, que no es poco», destaca el intérprete.

- Para concienciar

Gracias a la película, piensa el andaluz, el público podrá conocer más datos sobre esta dolencia, desconocida todavía para muchos. Y, si es posible, «para darle un tironcillo de orejas a las administraciones. Debe ser muy difícil mandar, pero pienso que deberían destinar más dinero a la investigación de enfermedades para poder luchar contra ellas». Rovira está creando una fundación junto a su pareja, la también actriz Clara Lago, para financiar proyectos de investigación. Por esas causas llegaría a correr un Ironman. O, como mínimo, un trayecto en bici desde Barcelona a Roma para recaudar fondos en la investigación contra el Síndrome de Rett, que su organización planea ejecutar para el año que viene.

El reparto se completa con Alexandra Jiménez en el papel de la mujer del protagonista y Karra Elejalde que da vida a su suegro. La relación de Rovira con el vasco es tanto profesional como personal, ya que han compartido los inicios de la carrera profesional del cómico, que comenzó a darse a conocer a través de sus monólogos por toda España. Con sólo tres años de meteórica trayectoria como actor en la gran pantalla, no tiene miedo a que deje de sonar el teléfono. «Si pasa, pues me volveré a los monólogos, y si no puedo, pues a camarero, y si no, a jardinero, que es una profesión que me gustaría probar si no tuviera alergia», bromea.