Las librerías están vivas

La venta de libros por internet ha aumentado en los últimos años hasta llegar al 15,4%, sin embargo las librerías siguen siendo el canal preferido de los lectores para comprar.

Cuando en 1994 Jeff Bezos fundó Amazon, hizo una lista de veinte artículos que podían venderse con éxito en internet. Quería crear una plataforma online para vender, pero no sabía qué. Finalmente se decantó por los libros, por dos motivos: su demanda es constante desde hace más de un siglo y el precio es relativamente bajo. Ahora es la librería más grande del mundo. Para muchos, la irrupción de esta plataforma iba a suponer la muerte de las librerías tradicionales, incluso de las cadenas, y en los anaqueles reservados en las grandes superficies sólo quedarían subproductos literarios. No ha sido así.

La industria del libro siempre ha vivido acosada por apocalípticos que auguran su inmediato final. Las librerías serían las víctimas más inofensivas, aunque tiene la virtud de la que nos advirtió Borges y que le puede servir de mágica protección: es lo más parecido al paraíso. En España se mantienen abiertas 103 librerías fundadas antes de 1940 –pasaron una guerra y carencias– y desde el año 2000 se han abierto más de 700. Sin duda, es un negocio, pero hay algo más que negocio. Se mantienen abiertas 3.967 (datos de 2016), lo que nos sitúa como el país con más librerías de la Unión Europea, extraño récord cuando es el tercero que menos gasta por hogar en libros, periódicos y papelería (Eurostat, abril de 2018). Al margen de estas paradojas, las librerías son el mayor canal de venta, con un 35% de facturación.

Hay que tener en cuenta que no todo establecimiento que vende libros es considerado «librería independiente»: la condición es que supere los 150.000 euros anuales, incluso menos, pero que sus ventas de libros sea del 50%. El 52% factura menos de 90.000 euros y sólo el 6,2% supera los 600.000 euros. Muchas librerías se han renovado hasta parecer viejos y tranquilos cafés o clubes de conferencia, sin embargo, la tendencia de ser vendedores de «e-readers» (libro electrónico) que se había abierto no ha cuajado: sólo el 5,1% ofrece estos productos. La ascensión de la compra de libros por internet ha crecido en los últimos años: ahora ocupa el cuarto lugar (15,4%), por detrás de cadenas de librerías y grandes almacenes, y dentro de este canal triunfa Amazon (62,5%), seguido de la Casa del Libro (20,4%).