Buscar Iniciar sesión

Giordano, en la trinchera

El escritor narra las aventuras de soldados italianos en Afganistán en la reflexiva «El cuerpo humano»
larazon

Creada:

Última actualización:

Una decisión muy audaz la de Giordano, al abordar una novela ambientada en Afganistán, tras el éxito mundial de «La soledad de los números primos», que se acaba de llevar a la gran pantalla. Y más aún, establecer las coordenadas reales del libro, no en la guerra, sino en «ese cajón de arena» donde no hay nada. Sólo polvo. Donde la luz es tan fuerte que causa conjuntivitis y la noche se vive en absoluta oscuridad porque prender una vela puede atraer un mortero.

En el confín del mundo

En ese opresivo ambiente transcurrirá la vida cotidiana de un grupo de soldados de diferentes orígenes y con distintas aspiraciones que se enfrentan a la primera misión militar real que se irá haciendo carne de narración de forma coral. Cada uno de ellos ha trasladado en su petate hasta aquel remoto confín sus problemas no resueltos, sus cobardías, sus fanatismos, la opresión de los suyos, preocupaciones mentales u orgánicas... La historia opera en dos niveles paralelos: el cutáneo, que pasa por mantener vivo su cuerpo expuesto a todo tipo de riesgos externos; y el subcutáneo, que se afana en superar traumas, dolores, preocupaciones íntimas y de relación... Por tanto, y como avanza el título, se trata de un libro muy somático en tanto que el cordón umbilical de toda la narración es el aspecto físico descrito en todas sus variantes: fuerza, debilidad, salud, enfermedad, respiración, humores biológicos, con toda la carga de animalidad imaginable. Además, y retorciendo a Paul Claudel, por descontado que hay una guerra. Pero aunque esté ambientada en un contexto bélico, la acción no se desarrolla yuxtaponiendo una facción a otra, sino en otro plano de contienda: el de cada miembro del pelotón respecto de sus propias emociones, evidenciando la peor batalla del hombre: la que debe librar consigo mismo. Poesía y biología al servicio de un texto reflexivo.

Archivado en: