Los vikingos toman el Museo Británico de Londres
Hasta el 22 de junio podrá visitarse "Vida y leyenda de los vikingos", una exposición que destaca la importancia que tuvo este pueblo escandinavo en el desarrollo del comercio y de la artesanía de la época.
Corría el siglo IX cuando unos guerreros navegantes empezaban a tomar protagonismo en Inglaterra. Eran los Vikingos, que luchaban por expandir su influencia por todo el mundo. Doce siglos llegan para hacer lo propio en el Museo Británico de Londres.
La exposición "Vida y leyenda de los vikingos", abierta al público desde el pasado 6 de marzo y que podrá visitarse hasta el 22 de junio, retrata a los legendarios escandinavos como comerciantes y algo pacificadores, además de guerreros agresivos que saqueaban iglesias y monasterios.
Muchos de los objetos no han sido vistos antes en el Reino Unido, pero también hay piezas de su colección permanente, junto con otras cedidas, principalmente por el Museo Nacional de Dinamarca.
"El tema principal de la exposición es la diversidad cultural y los contactos que los vikingos establecieron durante su extraordinaria expansión entre alrededor el año 800 y 1050", asegura Tom Williams, uno de los comisarios de la muestra.
Un barco de 37 metros de largo, principal atractivo
La estrella de la exposición es un barco de guerra de 37 metros de largo, cuyos restos fueron hallados en 1997 en Dinamarca y que por primera vez ha salido de ese país. A través de fotografías y monitores, el Británico explica el proceso de reconstrucción del barco, encontrado en el fiordo Roskilde y que era apenas el 20 por ciento de la pieza original.
Según Williams, es el barco de guerra más grande hallado hasta ahora de los vikingos y permite conocer la tecnología de la que disponían y que les permitió "viajar tan lejos como hasta América del Norte, hacia el oeste, o al Mar Caspio, hacia el este, así como a las orillas del norte de África y, por supuesto, Europa".
Se estima que este barco fue construido en siglo XI, el de mayor esplendor de la Era de los Vikingos, cuando Inglaterra, Dinamarca, Noruega y posiblemente una parte de Suecia estaban unidos bajo el reinado de Canuto el Grande.
Además del denominado Roskilde 6, el Museo expone joyas, vasijas, sedas y otros objetos arqueológicos que muestran el contexto global en que los vikingos desarrollaron su expansión.