¿Existe la marca Amaral?

Desde que lanzaran su primer álbum en 1998 nos han llenado la cabeza de canciones pegadizas, estribillos que todos conocemos y hemos tarareado. Sin embargo, Eva Amaral y Juan Aguirre consideran que “todavía estamos aprendiendo, sólo llevamos siete discos”. Ocho desde que saliera “Nocturnal”, un trabajo que viene a consolidar aún más el particular sonido del dúo de Zaragoza.

Eva: No lo habíamos pensado, pero justo ayer nos hicieron la misma pregunta. Realmente es un concepto que lleva en nuestras canciones desde los primeros discos, pero no habíamos caído.

Juan: Pasa por estados de ánimo diferentes. Hay puntos donde los instrumentos aportan texturas más oscuros y otros en los que la voz de Eva al subir da luminosidad. Nos gusta jugar con los contrastes.

Eva: Juan y yo pasamos una buena temporada en el estudio terminando las estructuras de las canciones y el enfoque sonoro, pero siempre hemos necesitado una tercera persona que desde fuera nos aporte una visión externa porque nosotros estamos demasiado dentro. En este caso, Chrys Taylor ha sido nuestro bajista desde “Gato negro, dragón rojo” y desde ese momento ha formado parte del grupo y lo valoramos bastante porque es un músico como la copa de un pino. Además, teniendo un bagaje musical diferente al nuestro, estilos que entroncan.

Juan: Todos nuestros discos tienen una gran parte de autobiográfico, pero eso no quiere decir que todas las canciones sean nuestra vida de principio a fin, porque si no sería muy limitado.

Eva: Yo concretamente sí. No vacía, pero cuando falleció mi madre me trastornó la situación y pasó una buena temporada hasta que conseguí recomponerme, coger fuerzas y volver a hacer canciones. Pero escribir me ayudó a superar la perdida, me sirvió de terapia.

Juan: Quizá estas opiniones tienen que ver con el hecho de que las salitas pequeñas se están viendo más afectadas por esto. Estaría bien no pensar que la música es sólo grupos reconocidos y festivales grandes, y pensar que hay un circuito de salas donde toca la mayoría de la gente. Los medios tenéis la labor de poner la lupa en ese mundo, que es del que nosotros venimos.

Eva: Hemos funcionado más con el corazón que con la cabeza realmente, así que esa parte más empresarial nunca nos ha interesado tanto porque nunca vamos a hacer algo que no nos llene.

Juan: Somos dos personas que se conocieron casi niños en Zaragoza, empezaron a tocar y por no pensar mucho en el nombre a mí se me ocurrió que Eva tenía un apellido molón porque tenía muchas aes.

Juan: En nuestro trabajo no hay mucha premeditación.

Eva: Esto pasa en muchos aspectos de la vida, que buscamos siempre respuestas complicadas a lo que sucede a nuestro alrededor, pero muchas veces la explicación es bastante más sencilla de lo que imaginamos.

Eva: Somos de Zaragoza y la gente que es más del norte es menos desinhibida a la hora de hablar de sentimientos, entonces en los primeros discos nos escondíamos detrás de 800 metáforas para realmente hablar de algo concreto. Camuflábamos todos estos sentimientos en imágenes distintas y con el tiempo hemos ido ganando el tener menos pudor en expresarnos.

Juan: Realmente hay muchos tipos de música, cantautores, folk, hip-hop... Nosotros éramos uno más y casi todos coincidíamos por los mismos bares porque es una ciudad grande pero no tanto como para que estemos separados. Nos conocemos casi todos. Y aunque llevemos años viviendo en Madrid nos siguen llegando los grupos nuevos porque con internet todo es más fácil.

Eva: El año anterior a nosotros se lo habían dado a Serrat y nosotros no sabíamos ni de donde nos llovía aquello porque era como un reconocimiento demasiado desproporcionados. No nos veíamos adalides de las músicas actuales de nuestro país. Entendemos que un gran nombre como Serrat lo reciba. Pero lo explican todo las fotos de aquel día con cara de sorpresa. Es muy gracioso, veo esas fotos y me parto de risa.

Juan: De hecho con muchos de ellos hemos tocado y son amigos, pero no nos consideramos precursores de nada porque sería arrogante. Ya nos vale con entendernos a nosotros mismos. Además, sería una falta de respeto porque en el caso de Sidonie llevan tocando más tiempo que nosotros, yo les he visto en conciertos pequeñitos. Y en el de Love of Lesbian, creo que empezaron antes de nosotros, y me parece admirable la trayectoria que han tenido de pelear por un proyecto hasta que le llegó el reconocimiento.