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Llega el rock hablado de Andrés Suárez

El músico gallego toca esta noche en Sevilla para presentar las canciones de su último trabajo «Mi pequeña historia» tras su exitoso paso por México y Argentina

El músico Andrés Suárez, en el centro junto a los integrantes de su banda, en un concierto
El músico Andrés Suárez, en el centro junto a los integrantes de su banda, en un conciertolarazon

El músico gallego toca esta noche en Sevilla para presentar las canciones de su último trabajo «Mi pequeña historia» tras su exitoso paso por México y Argentina

Andrés Suárez ya no necesita cantar en el metro de Madrid para ganarse la vida como músico. Ahora triunfa en las listas de éxito, abarrota conciertos a ambos lados del Atlántico y tiene la suerte de vivir una fama comedida. Esta noche ofrecerá un concierto en Sevilla, una ciudad que le apasiona y a la que vuelve siempre que le dejan y hoy presenta las nuevas canciones de su último disco «Mi pequeña historia», un trabajo donde abandona en cierta medida su tradicional estilo de cantautor convencional a favor del rock. Que no se equivoquen sus admiradores porque Suárez mantiene intacto su estilo, entre quejumbroso y tierno, que le ha servido para diferenciarse de otros músicos de su generación. Paradójicamente, es todo lo contrario, la flecha se ha dirigido en el sentido opuesto y ha desandado su periplo musical hasta alcanzar las influencias con las que creció en sus primeros escarceos con la música. Una relación que arranca a los catorce años prácticamente y de la que aún no se ha bajado, que se ha impregnado a lo largo de este tiempo de sonidos comunicantes pero a la vez contradictorios, pero que tiene una explicación. «He querido innovar porque llegaba del disco anterior, ‘Moraima’, que era un trabajo más acústico, apoyado en el piano y guitarra. El público lo recibió muy bien y me abrió las puertas, pero me apetecía cambiar. En realidad, lo que he hecho ha sido volver, porque yo empecé el rock», asegura el cantante que tuvo grupos como Leño, Extremoduro y Barricada entre sus prioridades antes de llegar a la canción de autor. «Quise evolucionar por honestidad, porque no quería hacer otro igual que el que funcionó también. Si el próximo es más de cercano al blues me parecerá perfecto, por eso no tengo problemas».

Nadie diría a primera vista que Andrés Suárez guarda un duro «rocker» dentro de sus románticas canciones, aunque rasgando un poco, viendo la manera de componer, la estructura de las canciones, se atisba rápidamente que sigue el estilo de la tradicional manera de entender el rock español. Letras duras, directas, sencillas, una manera de decir alejada de la marcada por otros autores que se sitúan más cerca de la poesía. «Hablo del amor, del sexo, de la amistad pero sin ningún tipo de tapujos. Creo en ese modo de vinculación porque hago un rock hablado y no gritado, pero tengo claro que cuento historias cotidianas y que lo que me acerca el público es que soy más artesano que artista», explica Suárez, quien defiende que hay que cantar «al día a día». Se mueve bien en las redes sociales donde su single «Te doy media noche» alcanzó a las pocas horas de salir el número 1 en Itunes. Prestigio y éxito en internet, donde hoy está la música, que sirven de estímulo y gasolina para permitirle hacer lo que realmente le apetece, que es toca y tocar. Para no perder el ritmo de la profesión elegida, hace los discos «como excusas para preparar una gira». «Toda mi vida he dado conciertos y si me metes en una habitación con tres paredes, sin aplausos, sin un vaso de ron no me lo creo. La música en directo es lo que realmente me importa porque es lo que he hecho durante toda mi vida, es lo que me emociona, saber que el público te espera, pero estar mirando una luz roja que pone grabando no es nada emocionante».

Lo acaba de comprobar en Latinoamérica, un lugar donde todavía se disfruta de las letras, del uso del lenguaje, de la palabra. «Se persigue mucho la canción de autor, se saben todos las letras. Te hablan de Serrat, Sabina, Víctor Manuel o Ruibal con una verdadera emoción, que puede que los quieran más que aquí», explica. Cómodo en Argentina y México, se lamenta del poco espacio que a la canción de autor se le da actualmente en la televisión y radio de nuestro país porque se da más cobertura a la música electrónica y a la que viene de fuera. «Allí de repente la trova, como la llaman allí, tiene una fuerza increíble y conocen hasta la gente que comienza en sitios como Libertad 8 y no tienen los prejuicios de nuestro país en los que desde hace unos años la palabra cantautor se ha recibido con las reticencias que sugiere un señor con una guitarra cantando canciones tristes a media luz». Suárez los reivindica, todo lo contrario, al reconocer el legado de los grandes del género que «tanto han aportado y que se han jugado mucho a lo largo del tiempo», remata mientras reivindica que al final «un cantautor no es más que alguien que canta sus propias canciones».

La cita es a las 21:00 horas en La Sala, un espacio que ofrece música en directo de pequeño formato, cercana, donde este artista gallego hará un repaso de lo mejor de su repertorio también para romper los prejuicios que lo han clasificado como un cantante sólo para el público femenino, mientras que él se defiende señalando que escribe, canta y escribe discos para el público en general, sea quien sea. «Como si tienen 86 años, me da lo mismo, lo importante es que se llevan el disco y aprecian tú música, que es lo importante».