Rodríguez Adrados: «El español es nuestro mayor éxito»
Defiende el idioma como logro histórico. Participa en el ciclo «Memorias de la Fundación March»
En tiempos como los actuales en los que las becas de estudio están en pleno debate público y son motivo de polémica, la Fundación Juan March organiza desde octubre la actividad «Memorias de la Fundación», referida a su propia trayectoria en este campo. Cada viernes, el periodista Íñigo Alfonso entrevista a personalidades de distintos ámbitos de la cultura que, en un momento de su formación o en sus inicios profesionales, recibieron sus ayudas. Conversaciones centradas en la figura y trayectoria del invitado y que, paralelamente, intentan retratar la evolución de la España de los 50, 60 o 70 proyectándola sobre la actual. Ayer le tocó el turno al filólogo y helenista Francisco Rodríguez Adrados, que en 1957 recibió una beca de la Fundación para realizar su trabajo: «Estudio sobre el origen y estructura del sistema verbal indoeuropeo». ¿Para qué sirvió esta ayuda?, abrió Íñigo Alfonso: «Para recabar información en universidades europeas sobre las lenguas más antiguas de Europa, aunque descubrí que la mayor parte de la información ya estaba en las bibliotecas de Madrid». Posteriormente habló de su aportación en el reciente Congreso de la Lengua Española que se desarrolló en Panamá: «Cómo el castellano, una pequeña lengua de un rincón, se convirtió en el español, la mayor aportación española al mundo. Los propios indígenas lo adoptaron porque les era más práctica. Nacionalistas o terroristas acaban hablando español, que es lo que al final les sirve. Llevamos la religión, conquistamos lugares, pero el mayor éxito de la historia de España es la extensión del idioma». Adrados opina que «la cultura española es universal, pero no hegemónica. El predominio lo tiene el inglés, contra él no podemos competir. En ciencias, escribir en español es difícil. No tenemos peso cultural y el apego a lo tradicional ha provocado, a veces, el rechazo fuera», afirmó el profesor, poniendo como ejemplo las grandes obras literarias.
Sobre el sistema educativo actual y la progresiva desaparición de las humanidades, Adrados sostiene, que, «los pedagogos han infectado la educación. El "pedagogismo"cambió los conocimientos por el protagonismo del niño. Todos han seguido la misma línea de rebajar los contenidos. Logré mantener el latín, pero los socialistas se lo cargaron. Después vino la derecha y tampoco hizo nada. Yo defiendo ampliar la enseñanza, que no sea solo información. Me parece trágico no tener un sistema educativo estable». Y para concluir, dijo sobre la crisis: «No sé, todos, incluidos políticos y economistas, estamos un poco a oscuras».