Stan Laurel: Con la soga al cuello

Aparecen en un archivo de los Países Bajos unos fotogramas dados por perdidos del corto «Detenido» (1924) protagonizado por El Flaco y que suponen un importante hallazgo.

Saber manejar los tempos en el mundo de la comunicación siempre ha sido un valor a tener en cuenta. A nadie debe sorprender, menos aún si ha pasado un par de ratos por la facultad de Ciencias de la Información, que una noticia cobre más o menos significado dependiendo del momento en el que se emita. A esta máxima universal de primero de Periodismo se debieron acoger los responsables del Archivo Fílmico de Frisia (provincia de los Países Bajos) cuando a principios de 2017 se toparon por casualidad con unos fragmentos perdidos de Stan Laurel, «El Flaco», en acción. Sacar entonces el descubrimiento hubiera tenido su fuerza por sí solo, pero viendo en el horizonte que la ciudad central de la región, Leeuwarden, iba a convertirse en la Capital Europea de la Cultura en menos de doce meses –junto a La Valeta (Malta)– prefirieron esperar y comenzar 2018 con algo diferente que ofrecer durante su «reinado».

Es por este «descubrimiento único en el mundo cultural», como lo definen desde Holanda, que desde ayer el archivo ofrece la película en cuestión, «Detenido» (1924) –de Scott Pembroke y Joe Rock–, al completo –también en su web–. Entienden en Frisia como un deber el mostrar ahora este hallazgo y por ello quieren «compartirlo con el público», escriben, y por ello tienen programadas varias proyecciones en pantalla grande para la próxima semana.

Un cortometraje en el que un fugitivo engancha a Laurel en un arbusto para permutar los atuendos. Ropa de presidiario a cambio de la de civil, quedando este último con el uniforme a rayas por el que a la Policía terminará llevándole a prisión. Da comienzo así otra de las inverosímiles historietas de El Flaco, esta vez sin El Gordo, que se completa en algo menos de 20 minutos. «Descubrimos secuencias de la película de Stan Laurel que se pensaba que se habían perdido. En una de ellas, interpreta a un prisionero que termina en la horca, un fragmento que nadie tenía controlado», ha manifestado el centro fílmico en un comunicado.

«Sketch» recuperado ahora que da buena muestra del absurdo –sin ofensas– marca de la casa y en el que, tras caer en la horca por azar, el cuello del protagonista se estira hasta límites insospechados con unos efectos especiales de comienzos del siglo XX que permiten a Laurel escapar de su verdugo. Una ausencia en el original conservado hasta hoy que se ha justificado por la costumbre de los años 30 en la que las películas se acortaban para ser vendidas con uso doméstico; todo lo que se entendía como «superfluo» era recortado antes de su lanzamiento al mercado.

Pese a haber sido encontrada ahora, la copia había estado en posesión del archivo desde hacía años –2007, concretamente– y ha sido rescatada mientras el equipo de holandés realizaba el inventario de las películas viejas de nitrato para un proyecto de digitalización. Fue Jurjen Enzing, empleado del archivo, quien reconoció al actor con ayuda de YouTube. Según cuenta la nota, se decidió investigar de qué filme procedían esos fragmentos en los que no se tenía más que la cara del que se intuía que era Laurel y, tras una búsqueda en internet, llegó a la respuesta en «Stan sin Ollie, entre 1917-1927», un libro escrito por Hardy, Ted Okuda y James L-Neibaur, expertos en El Flaco. La escena aislada del estiramiento del cuello venía «perfectamente descrita», reconocen, y hasta los propios autores declaraban que esa secuencia se había perdido... hasta su recuperación en el archivo de Frisia, que, por lo que se ha investigado en estos meses, es el único poseedor de la copia: «Es la única existente en el mundo que incluye la escena de la horca». Pero no solo faltaba ésta: «La secuencia en la que Laurel y un compañero prisionero cavan un túnel de escape» también ha sido localizada.

Aunque no ha sido internet y Google el único camino tomado en todo este tiempo. Tras el descubrimiento «de un rollo cuya perforación ya comenzaba a romperse», la institución cultural, a través del Eye Film Institute de Ámsterdam, envió una copia y se puso en contacto con Lobster Film en París, un archivo de películas comerciales que se especializa en la restauración y digitalización. Centro que, entre otras cuestiones, es conocido por su colección de películas de Laurel y Hardy, y por haber publicado una caja de DVD con las cintas de «El Flaco», incluida el «Detenido», que por razones obvias no contaba con los «nuevos» fragmentos. Y continuaron las averiguaciones: «Cuando hicimos el descubrimiento, pusimos como prioridad determinar si se trataba de un fragmento perdido de Stan Laurel y varios expertos estadounidenses dijeron que ‘‘sí’’, pero eso tampoco era garantía de nada, por lo que mantuvimos la investigación abierta. Además tuvimos que descubrir cómo la película terminó con nosotros», explican. Así que retrocedieron hasta 2007. Fue entonces cuando el Archivo Fílmico de Frisia recibió una donación del historiador e investigador aficionado Dirk Swierstra, natural de Leeuwarden, en la que se encontraba una colección de películas de nitrato publicadas comercialmente. Cintas que procedían del sótano de una antigua tienda de fotografía de la capital de la región, perteneciente a la familia Van Kampen, quienes adquirieron un lote de películas por 100 florines neerlandeses –unos 46 euros– poco después de la Segunda Guerra Mundial con el fin de alquilarlas o mostrarlas al público. Colección que incluía varias de nitrato de 35 mm que luego terminaron en el almacén.

De eso hace ya muchos años, con la versión digitalizada y final que el Archivo Fílmico de Frisia recibió antes de Navidad la interpretación de E flaco vuelve a estar de actualidad.