Mundial
La campeona del mundo de muay thai que ofrece clases tras perder su empleo en una gasolinera
La española Lara Fernández busca ingresos para poder participar en el mundial de Tailandia se celebrará el próximo mes de diciembre
Es campeona del mundo de Muay Thai pero, aún así, las cosas no son fáciles para ella. Lara Fernández -casi todos la conocen como Lara Pizza Power porque ”es la pizza la que le da la fuerza”- trabaja ocho horas diarias en una gasolinera para poder costearse sus entrenamientos y viajes. O mejor dicho trabajaba. Acaba de perder su empleo y ahora solo realiza suplencias en vacaciones lo que le ha llevado a tomar la decisión de ofrecer clases particulares a través de las redes sociales. “Mi trabajo en la gasolinera acabó (solo suplo vacaciones) por lo que dispondré de tiempo para dar clases personales a todo el que quiera. Así también podré llevar mi preparación para los mundiales en Tailandia en Diciembre”, afirma Lara.
Este deporte apenas cuenta con patrocinadores y Lara Fernández, actual campeona del mundo de Muay Thai y K1, trabajaba en una gasolinera con un contrato temporal de siete horas y media que compatibilizaba con sus duros entrenamientos.
“Me gusta la gasolinera, pero prefería que mi trabajo fuera mi deporte. Tras ser campeona del mundo, al día siguiente a las cinco de la mañana debía estar en pie para ir a trabajar a la gasolinera”, relataba tras proclamarse campeona del mundo.
Para poder dedicarse al 100% a su verdadera profesión, Lara Fernández necesita de patrocinadores que le den el apoyo económico necesario para seguir ganando: “Mis entrenamientos los subo, pero como si fuera una modelo fitness, no una luchadora de muay thai, para que se fijen en mí”.
Ahora al perder el empleo necesita ingresos para poder seguir entrenando. Lara Fernández defenderá sus títulos de campeona del Mundo de Muay Thai y K1 en Tailandia. Pero para seguir viajando, compitiendo y entrenando, Lara necesita buscar financiación y las clases particulares son su nueva idea para seguir en lo alto de este deporte.
De momento, a su anuncio realizado a través de redes sociales le han llegado muchos “me gustas” y pocos clientes. Un poco como ha vivido siempre su carrera deportiva, con muchos halagos y pocos patrocinadores. Pero como en el ring, Lara no se rinde.