Real Madrid
Benítez según Benítez
En una conferencia tras entrenar al Inter, Rafa explicó su método: rotaciones, dominar, pero tener otras alternativas, y entrenamientos de 90 minutos
Cuando a Rafa Benítez le preguntan si es un entrenador defensivo, él saca sus números. Le gusta probar con datos lo que se dice. Es muy científico para eso. Y habla de sus 99 goles con el Chelsea o que el Nápoles ha sido el equipo de Italia que más ha tirado a puerta y que más ocasiones de gol ha creado. No niega, además, que para que surja el talento se necesita orden y que para alcanzar el éxito es fundamental mantener un equilibrio ataque-defensa. Es su ideario, las ideas base, tras años en los banquillos.
En mayo de 2012, el actual entrenador del Real Madrid dio una conferencia a jóvenes entrenadores en Toledo en un curso de la Federación Española. Allí, con un iPad en la mano y mediante diapositivas, desgranó qué tipo de técnico es y sus métodos: el equilibrio, el conocimiento de casi todos los datos y la insatisfacción permanente van a ser los factores que más se manejen esta temporada en el Bernabéu.
Conocer el club
Después de entrenar en el Liverpool, el Chelsea o el Inter, Rafa Benítez considera que el primer paso hacia el éxito es conocer en qué proyecto estás embarcado y cuáles son la cultura y la ambición de la entidad en la que trabajas. En el Real Madrid tiene eso ganado porque lo conoce desde que era niño, pero aun así no ha perdido el tiempo para empaparse de lo que es el club ahora mismo y cómo son las instalaciones en las que trabajan la primera plantilla y la cantera.
Datos
El fútbol es observar a los futbolistas, pero también la suma de muchos datos que analizar. Rafa Benítez trabaja con varias empresas de estadísticas que le nutren de todo lo que pide y que él y sus ayudantes, después, utilizan para sacar conclusiones. Varios de los datos que quiere del Madrid de las últimas temporadas van desde las jugadas a balón parado hasta las lesiones, que fueron numerosas y esenciales para que Ancelotti acabara sin títulos.
El club es el estilo
Dicen desde el Madrid que Rafa Benítez no va a presentar un fútbol que no guste al Bernabéu. Se ha hablado con él de eso, pero es que ya lo tenía claro. Conoce la cultura del Real Madrid y que los socios no le van a permitir otra cosa que no sea jugar al ataque. Ancelotti empezó defendiendo la posesión y después fue variando hacia una posesión vertical. Benítez va a apostar por tener la pelota, pero sin despreciar cualquier otro modo de jugar que ayude a ganar los encuentros.
Vídeos
En la misma conferencia ante futuros entrenadores, Rafa Benítez cuenta que cuando estaba en Almendralejo tuvo un bebé y que por las noches, para que su esposa descansase, él le daba el biberón. Y mientras lo hacía, se ponía vídeos de los rivales. El biberón ya no tiene que darlo, pero sigue viendo vídeos, aunque ahora también prepara los partidos con los sistemas de animación que le permiten las nuevas tecnologías y que, según sus palabras, permiten llegar a todos los jugadores, sea cual sea el idioma en el que hablen.
Entrenamientos
Benítez desvela una de las claves de las que quizá se hable menos: el 80% de los entrenamientos son con el balón. Varios jugadores que han trabajado con él reconocen que a veces es muy insistente. Al entrenador madrileño le gusta repetir varias veces un ejercicio hasta que los futbolistas lo hacen casi de manera innata, sin pensar, como quien respira. Explica que los entrenamientos duran entre una hora y hora y media, con instrumentos para medir la fuerza y el cansancio de los futbolistas. Es un entrenador partidario de las rotaciones. Además, hay que saber distinguir a la hora de hacer ejercicios entre jóvenes y futbolistas con más experiencia.
El éxito
A pesar de todos los datos que maneja, del conocimiento o de los futbolistas que dispone, Rafa Benítez sólo está convencido de una cosa: el éxito es impredecible y no se sabe muy bien a qué responde. Aunque está claro que la suma de más factores ayuda, él piensa que lo fundamental es convencer a su plantilla de que ganar es la normalidad y que su papel como entrenador consiste en estar siempre insatisfecho.