Carlos Sainz Jr
Arriesgar o conservar
Hamilton busca desde la «pole» mantener sus opciones de título y evitar el alirón de Rosberg.
Hamilton busca desde la «pole» mantener sus opciones de título y evitar el alirón de Rosberg.
Hoy a las cinco de la tarde, no sonarán clarines y timbales en el circuito de Interlagos en Brasil. Pero Nico Rosberg se enfrentará al «toro» más importante de su vida. La posibilidad de lograr su primera corona está ahí, más cerca que nunca, y no lo tiene nada difícil. No hay estrategias que valgan ni tácticas diferentes. Lo que tiene que hacer es marcar a su rival, Lewis Hamilton, hacer lo mismo que él, no salirse de ese guión. De esta manera arriesgará lo menos posible. Lo suyo, con la ventaja que tiene en la clasificación general, es conservar y dejar que otros se la jueguen. Pero claro, como suele ocurrir en el mundo del fútbol, si sales a empatar acabarás perdiendo. Y en este sentido deberá tener cuidado con los pilotos que vengan por detrás, sobre todo con el más temido: Max Verstappen. Hamilton marcó ayer la «pole» y se centrará en la victoria como único objetivo. Si no falla en la salida, su Gran Premio seguirá la línea de sus últimas victorias. Correr en solitario hasta cruzar la línea de meta. Si no acierta en el momento de arrancar, las cosas cambiarán, porque en el circuito brasileño sólo hay dos puntos para adelantar y se pierde mucho tiempo en la zona más virada. Otro punto a tener en cuenta será la estrategia con los neumáticos si la lluvia aparece. En este lugar las previsiones meteorológicas no funcionan con la precisión de otras zonas porque en cualquier momento una nube descarga y puede comprometer las estrategias. Lo peor de todo es que a veces no llueve lo suficiente como para cambiar de ruedas y hay que aguantar varios giros con las gomas de seco rodando sobre asfalto mojado. Es decir, la peor situación posible para un piloto y sobre todo para los estrategas que «piensan» desde el muro de boxes.
Sin embargo, si Rosberg decide pasar al ataque debe saber que Hamilton se mostrará implacable y que el riesgo de choque resulta muy elevado. Ayer la diferencia entre ambos fue de sólo una décima, aunque de todos es sabido que, si llueve, el rendimiento del piloto alemán no suele ser el mejor. Todo lo contrario que el inglés, que se siente como pez en el agua en esta clase de condiciones. Además, Hamilton consiguió su «pole» número 60 y ya se encuentra a sólo cinco de su venerado Ayrton Senna.
Si Rosberg gana el Gran Premio, se convertirá en campeón haga lo que haga su rival; si queda segundo, necesitaría que Hamilton cruzara la meta en cuarto lugar; si lo hace en tercera plaza, Hamilton tendría que terminar en la sexta; y así varias combinaciones que incluso alcanzan el empate y deberían tenerse en cuenta los segundos y terceros puestos logrados durante la temporada.
Por su parte, Fernando Alonso, a pesar de los problemas de fiabilidad que mostró el McLaren el día anterior, se clasificó en décima posición y Carlos Sainz en la decimoquinta.