El Sevilla inició con paso firme y con fases de gran juego la defensa del título de campeón de la Liga Europa, en un partido en el que superó por 2-0 al Feyenoord holandés, un histórico del fútbol europeo venido a menos que mostró muy pocas cosas en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán.

El equipo andaluz marcó sus dos goles en la primera mitad y sólo la falta de puntería y la relajación debido a su superioridad evitó que el conjunto holandés se llevara a Rotterdam una goleada.

Pese a ser el arranque de un torneo en el que los hispalenses se han proclamado campeón en hasta tres ocasiones, el técnico, Unai Emery, utilizó siete jugadores que no usó de salida el pasado domingo en este escenario ante el Getafe, entre ellos dos que debutaban en la presente temporada, el centrocampista camerunés Stéphane M'Bia y el central francés Timotheé Kolodziejczak.

En esta alineación había muchos hombres con ganas de aprovechar los minutos y ganarse la confianza del técnico, como el propio M'Bia, unos de los jugadores que fue fundamental en la consecución del último título europeo cuando un gol suyo en la prolongación de la semifinal ante Valencia metió al Sevilla en la final de Turín.

Otros, como los extremos José Antonio Reyes y el cedido por el FC Barcelona Gerard Deulofeu, también salieron con ganas y fue una falta lanzada por el catalán la que propició el 1-0 al ponérsela media al centrocampista polaco Gregory Krychowiak para que remachara dentro del área chica cuando se cumplía el minuto ocho.

Controló bien la formación española ante el Feyenoord, que llegó al partido con un comienzo de temporada mediocre que le tiene, tras cinco jornadas de su torneo doméstico, en la zona baja de la tabla.

Los holandeses, cuyo entrenador, Fred Rutten, dejó de salida en el banquillo a su hombre mas goleador en este comienzo del curso, Mitchell Te Vrede, se vieron sorprendidos por el ímpetu del rival.

Rebasada la media hora, en una jugada calcada a la del primer gol, Deulofeu sacó una falta media al corazón del área y en esta ocasión M'Bia, de cabeza, puso el segundo.

El primer aviso serio de los visitantes llegó minutos después tras una acción de su jugador más peligroso en el ataque, Elvis Manu, a quien le frenaron con falta y su lanzamiento, por mediación de Jens Toornstra, acabó con el balón repelido por un poste.

El conjunto de Rotterdam, con la dirección en el centro del campo de su capitán, Jordy Clasie, intentó tener más tiempo el balón y acercarse a las inmediaciones del joven meta Sergio Rico, pero ello también propició que sus centrales, Sven Van Beek y el exmalaguista Joris Mathijsen, se las tuvieran que ver en los contragolpes con Deulofeu y el colombiano Carlos Bacca, al que incluso le anularon un gol por fuera de juego tras pase del barcelonista.

La segunda parte se inició con una gran ocasión de Bacca tras gran pase de Reyes, otra de Deulofeu y una tercera del argentino Éver Banega frente a un rival que se vio por momentos desbordado ante lo que le podía caer.

No obstante, el tercero no llegó en este impetuoso arranque del segundo período para un Sevilla que se gustó con el control del balón pero que con el paso de los minutos dejó de ser tan profundo frente a un Feyenoord que no inquietó nada y que se conformó con no salir goleado.

- Ficha técnica:

2 - Sevilla: Sergio Rico; Diogo Figueiras, Carriço, Kolodziejczak, Fernando Navarro; M'Bia, Krychowiak (Danis Suárez, m.60); Reyes, Éver Banega, Deulofeu; y Bacca (Iago Aspas, m.60).

0 - Feyenoord: Vermeer; Wilkshire, Van Beek, Mathijsen, Nelom; El Ahmadi, Clasie (Te Vrede, m.73), Toornstra, Vilhena; Schaken (Basaçikoglu, m.64) y Elvis Manu (Boetius, m.82).

Goles: 1-0, M.08: Krychowiak. 2-0, M.31: M'Bia.

Árbitro: Ruddy Buquet (FRA). Amonestó a los locales Kolodziejczak (m.33) y M'Bia (m.76) y a los visitantes Vilhena (m.53) y Elvis Manu (m.81),

Incidencias: Partido de la primera jornada en el Grupo G de la Liga Europa, disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante cerca de treinta mil espectadores, entre ellos cerca de un millar de seguidores holandeses. Terreno de juego en buenas condiciones.