Decía Sir Alex Ferguson que el United tenía garantizados diez puntos más por temporada con Peter Schmeichel entre los tres palos. Con la misma camiseta, De Gea lleva dos temporadas siendo el mejor futbolista de un equipo más deprimido que en los tiempos del guardameta danés, y sumando puntos extra con sus paradas. Ayer, lo hizo con España, confirmando que el relevo en la portería está preparado e incluso podría adelantarse a lo que Del Bosque tiene previsto. «¿De Gea? Increíble. Ha parado la primera y parece que iba a parar todas. Ha parado cinco, seis, ocho decisivas... No sé cuantas. Nos ha hecho ganar», decía Mata a TVE haciendo un perfecto resumen de lo que fue la actuación del portero.

No exageraba el centrocampista, porque David se hizo enorme para los delanteros ucranianos, que apuraban sus últimas opciones de estar en la Eurocopa de Francia el próximo verano. Con los pies, con las manos, derrochando reflejos o colocación, no encontraron la forma de superarlo. Una actuación espectacular de las que acostumbra a tener con este United menos dominador.

«Ucrania ha llegado con mucho peligro, tiene jugadores buenos en banda, pero no han estado acertados por las buenas acciones defensivas nuestras y también por la actuación de nuestro portero», decía el seleccionador, que además de a De Gea destacó el juego de Thiago. Ellos, junto a Fàbregas, un «veterano» de 28 años que alcanzó las cien internacionalidades, son algunos de los nombres de la España que viene. Cesc, capitán ayer, falló su cuarto penalti en cuatro intentos con La Roja. No acierta durante los partidos, pero no falla en las tandas de desempate. En 2008 y 2012 España pasó a semifinales y la final, respectivamente, con un penalti suyo.