Los ultras rusos pueden presumir de estar entre los más violentos de Europa, especialmente un grupo conocido como Gladiators Firm 96 de ideología nazi, expertos en artes marciales.

Lo que vamos a ver con los rusos no lo hemos visto en la vida. Estos tíos no son unos ultras normales. Son traficantes de armas, van a por la Policía, no se cortan». Ésa es la advertencia que los ultras del Athletic lanzaron en las redes sociales días antes de que las hordas del Spartak provocaran el caos en Bilbao a menos de cuatro meses del arranque del Mundial en su país.

Los ultras rusos pueden presumir de estar entre los más violentos de Europa, especialmente un grupo conocido como Gladiators Firm 96 de ideología nazi, expertos en artes marciales y que han protagonizado numerosos incidentes en el pasado. Las «hazañas» del grupo incluyen peleas con otros ultras en su país, desplazamientos por media Europa para sembrar el pánico, peleas semidesnudos en bosques, que graban y sirven como entrenamiento para medirse con otros ultras. Y el apoyo a su selección como demostraron en la última Eurocopa cuando tomaron Marsella y fueron una pesadilla para el enorme despliegue policial que se produjo en el puerto de la ciudad francesa. Esta misma temporada, los ultras del Spartak ya sembraron el caos en Sevilla durante el partido de Liga de Campeones contra el conjunto andaluz. Una de sus características es que suelen estar perfectamente coordinados a la hora de provocar disturbios o peleas, y que, al contrario que los «hooligans» ingleses, no acostumbran a ingerir alcohol, al menos antes de sus batallas campales, algo que los convierte en más eficaces y peligrosos. También suelen utilizar bengalas y material pirotécnico dentro y fuera de los estadios.

Pero los rusos no son los únicos. Los ingleses siguen teniendo a sus «hooligans» y los grupos ultra también son protagonistas en Italia, Turquía, Alemania, los Balcanes... pero «los rusos son ahora los que pegan a los ingleses», según afirma la Policía.