Su fiesta tras perder en el Calderón pudo molestar a la afición que disfruta con sus goles.

Cristiano Ronaldo se machaca cada día en el gimnasio a ritmo de «reggaeton» y con la misma música celebró el sábado la fiesta de su treinta cumpleaños. «Si tú no te enamoras/podemos pasar un par de horas/siempre que te sientas sola», cantaba con un sombrero en la cabeza junto a Kevin Roldán, un cantante colombiano ídolo de los amantes de este género. Es amigo de James y fue la atracción principal de una noche en la que 150 personas felicitaron a «CR» por su aniversario. La fiesta ya estaba prevista con antelación, pero después del 4-0 del Vicente Calderón estaba claro que los vídeos y fotos de la noche iban a molestar a una buena parte del madridismo.

Para algunos se trata de la vida personal de un futbolista ultra profesional, que tiene derecho a desconectar. Para otros, resulta chirriante ver cómo varios jugadores del equipo blanco cantaban el estribillo del pegadizo «Si no te enamoras», con una sonrisa de oreja a oreja. Neymar también sopló las velas en la noche del jueves, pero con el agravante de que tenía entrenamiento al día siguiente (al que llegó cinco minutos tarde) y un partido tres días después. A la fiesta de «CR», celebrada en un lujoso local de La Finca, acudieron Navas, Coentrao, Modric, Marcelo, Hierro y Chendo y Clement, segundo de Ancelotti. Evidentemente, no celebraban la derrota en el Calderón, ni estaban felices tras su peor partido del curso, pero hubiera sido más adecuado mantener la cena y el baile posterior en un círculo más íntimo. Algo complicado con Roldán como maestro de ceremonias, que «retransmitió» en las redes sociales sus días en Madrid. Primero se grabó caminando por La Castellana, luego cantando con Ronaldo el estribillo de uno de sus éxitos y, finalmente, se fotografió en Barajas con una camiseta firmada por la estrella portuguesa. Un futbolista que ha rendido al Bernabéu con sus goles y su gran rendimiento, y que podría haber pedido más intimidad a sus invitados.