Se agota

Madrid y Barcelona, en riesgo de quedarse sin vivienda nueva en pocos meses

El “stock” de unidades disponibles se reduce un 39% y un 18% respectivamente en el último año. Si el ritmo de absorción sigue así, la capital se quedará sin oferta en cinco meses y la ciudad catalana, en doce, según Sociedad de Tasación

Imagen de bloques de pisos nuevos en construccion.
Imagen de bloques de pisos nuevos en construccion.Jesús G. FeriaLa Razon

Buscar vivienda nueva en Madrid o Barcelona se ha convertido en una ardua tarea no sólo por los precios sino porque, literalmente, apenas hay donde elegir. Y cada vez menos. Hasta el punto de que, si las cosas avanzan como hasta ahora, en unos pocos meses podría no haber siquiera oferta de este producto para satisfacer su pujante demanda, según alerta Sociedad de Tasación en su último censo sobre este tipo de vivienda.

Según el informe, que analiza todas las promociones de uso residencial -sin iniciar, en construcción y terminadas, con fecha máxima de cinco años de antigüedad respecto a la fecha de alta-, en los municipios de Madrid de más de 50.000 habitantes hay 411 promociones de vivienda nueva que suman 18.355 casas, con un stock disponible de 3.088 unidades. Esta cantidad supone una reducción de 1.377 viviendas en el último año, un 30,8%. La situación es más crítica en el caso de la ciudad de Madrid, en la que el “stock” se ha reducido desde las 2.507 hasta las 1.542 unidades, un 38,5% menos. Con estas cifras, Sociedad de Tasación asegura que, si se mantienen los ritmos actuales de absorción, la oferta de vivienda nueva podría agotarse en cinco meses en la Comunidad de Madrid y en cinco en el caso de la capital.

La situación es algo mejor en Barcelona y su área metropolitana. En esta zona, la tasadora ha contabilizado 517 promociones de vivienda nueva que suman 12.523 viviendas promovidas con un stock disponible de 4.442, muy similar al de hace un año, cuando era de 4.469. No obstante, en la ciudad de Barcelona la situación también es límite. El “stock” se ha reducido en el último año un 17,8% tras pasar de 1.409 a 1.158 unidades. Y si el ritmo de absorción de mantiene, la oferta de vivienda nueva se agotaría en 12,9 meses en los municipios metropolitanos y en 12,6 en el caso de la capital catalana.

Demanda disparada

La vivienda nueva está inmersa en una suerte de tormenta perfecta que está agotando rápidamente su oferta. Como aseguró la semana pasada Fotocasa en su último análisis sobre los datos de compraventas del INE, “la vivienda de obra nueva está viviendo un auge sin precedentes desde el estallido de la pandemia. Muchos españoles están optando por promociones de vivienda a estrenar por diversas razones: una de ellas es porque suelen tener espacios comunes como jardines o piscinas y en la mayoría de los casos cuentan con terraza, características que se han vuelto imprescindibles para los ciudadanos que buscan vivienda tras el confinamiento”, según explicaba su directora de Estudios y portavoz, María Matos.

Sin embargo, este fuerte empuje de la demanda, solvente por los ahorros acumulados durante la pandemia y con el viento de cola hasta ahora de una financiación barata -habrá que ver qué ocurre a partir de ahora con la anunciada subida de tipos de interés del BCE- no se ha visto respondido por la oferta. En los últimos años, los promotores tienen importantes dificultades con el suelo en ciudades como Madrid o Barcelona. Los farragosos y lentos trámites administrativos necesarios para obtener suelo finalista en el que construir dificultan el desarrollo de vivienda nueva. A esto se ha sumado la desbocada inflación. Como explicaba Matos en su análisis sobre las compraventas, la espiral de precios ha afectado “al coste de los materiales, a la producción y logística, lo que ha ocasionado la ralentización y paralización de algunas promociones”.

La pujanza de la oferta y el limitado recorrido de la demanda están conduciendo a una escalada de precios de este tipo de viviendas, como ya apuntó el Banco de España en su Informe de Estabilidad Financiera de finales del pasado año. La consultora CBRE apuntó este mismo martes que este año escalarán un 4,4% este ejercicio. El regulador, como ponen de manifiesto ahora los datos de Sociedad de Tasación, también advertía de que la oferta de vivienda nueva “muestra un escaso dinamismo y, de continuar las tendencias actuales, podía ser insuficiente para poder absorber en los próximos años incrementos adicionales de la demanda”.