Más caras

La escasez de materias primas amenaza con empujar más al alza el precio de la vivienda nueva

El Banco de España advierte de que, si persisten los problemas de suministro, su coste se encarecerá

Dos jóvenes pasan por delante de un edificio de viviendas en construcción
Dos jóvenes pasan por delante de un edificio de viviendas en construcciónCristina BejaranoLa Razón

La vivienda ha resistido mejor de lo que el propio sector esperaba los embates del coronavirus. Hasta tal punto, que en los ocho primeros meses del año se ha producido un fuerte repunte de las compraventas del 14% con respecto al mismo periodo de 2019. Un incremento de operaciones que se ha traducido a su vez en una subida de precios del 3,3% en el segundo trimestre, rompiendo de este modo con la tendencia de desaceleración que venía experimentando desde principios de 2019. Al dinamismo del sector se puede sumar a corto plazo otro factor que puede presionar todavía más al alza los precios: la crisis de las materias primas. Los materiales no llegan y los que arriban a España lo hacen a precios desorbitados, como ha denunciado en las últimas semanas la Confederación Nacional de la Construcción (CNC). Y el problema, de persistir, podría “provocar presiones adicionales en el precio de la vivienda nueva”, según advierte el Banco de España en su último Informe de Estabilidad Financiera.

Pero la crisis de suministros no es el único factor adicional que el regulador vislumbra en el horizonte para presionar el precio de la vivienda. El organismo que dirige Pablo Hernández de Cos advierte también de que el aumento de actividad derivado de la implementación del Plan de Rehabilitación de Vivienda y Regeneración Urbana, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) y dotado con 6.820 millones de euros del Fondo Next Generation de la UE puede contribuir también a incrementar los precios. “El aumento de la actividad derivado de la implementación del PRTR podría provocar tensionamientos adicionales en los costes de la mano de obra y los insumos del sector de la construcción”. En el caso de la mano de obra, la CNC viene denunciando también que el sector tiene un déficit de 700.000 trabajadores que ponen en riesgo la correcta ejecución de los fondos europeos porque el sector no encuentra trabajadores. Una circunstancia que también en los salarios.

Ejecución de los fondos

La patronal también ha denunciado que el incremento de costes de las materias primas pone en riesgo la propia ejecución de los fondosporque muchos proyectos han dejado de ser rentables por los sobrecostes de construcción, lo que ha llevado incluso a la paralización ya de muchos de ellos. Para solucionarlo, el sector ha solicitado al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana que recupere el sistema automático de reequilibrio de precios que permita hacer frente a esos sobreprecios para hacer viables las obras.

La vivienda nueva es la que más incrementos de precio está registrando en los últimos años, según constata el Banco de España. Una circunstancia que, en su opinión, puede relacionarse con la mayor capacidad de adaptación de esta tipología de vivienda a las preferencias de los compradores y a la mayor escasez en la oferta de este segmento frente al de segunda mano. El regulador asegura en su informe que la oferta de viviendas “muestra un escaso dinamismo y, de continuar las tendencias actuales, podía ser insuficiente para poder absorber en los próximos años incrementos adicionales de la demanda”.

A pesar de este incremento de precios, desde el Banco de España consideran que, a diferencia de lo que ocurre en algunos países europeos, en España la situación del mercado inmobiliario no se encuentra en una fase preocupante y, aunque el crédito hipotecario nuevo esté creciendo con fuerza en 2021, no se observa una relajación en las condiciones de concesión. Un hecho que constata con la percepción que los ciudadanos comienzan a tener del mercado inmobiliario. En su reciente informe “Radiografía del mercado de la vivienda en el segundo semestre de 2021″, Fotocasa recoge que la percepción de los ciudadanos de que España se encamina hacia otra burbuja inmobiliaria está creciendo. Así, si en febrero de 2021 la idea de que España está próxima a sufrir una “burbuja inmobiliaria” tenía una nota de un 5,7 sobre 10, en septiembre de 2021 ha subido a un 6,1 de media. Los particulares achacan este aumento de la percepción a los elevados precios del alquiler (53%) y de compra (48%).