Rajoy no publicará la lista de los 715 investigados por Hacienda

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha reprochado al PSOE que ahora demande esa lista de «amnistiados» cuando «jamás» dio datos fiscales en los 22 años en los que gobernó España.

Bronca sesión de control al Gobierno por el «caso Rato». La cercanía de las elecciones autonómicas y municipales está elevando la tensión parlamentaria y la oposición cree haber encontrado su filón en lo que hoy representa la figura del ex vicepresidente del Gobierno y en la amnistía fiscal de 2012. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, defendió ayer ese proceso extraordinario de regularización fiscal, «que ni limpia ni borra delitos», frente a lo que ocurrió con los que pusieron en marcha los ejecutivos socialistas.

Rajoy se enzarzó con el líder de la oposición, Pedro Sánchez, quien le instó a que publicase la lista de las personas que se acogieron a la amnistía y proclamó solemnemente que, si no lo hace Rajoy, lo hará él cuando llegue al Gobierno. Una promesa que exigiría cambiar la ley y que se encontraría con el problema, no menor, de que los cambios legales no se pueden aplicar con carácter retroactivo. Rajoy le recordó que el PSOE ha estado veintidós años en el Gobierno y que jamás dio ningún dato de un solo contribuyente de la Agencia Tributaria, ni por regularización ni porque hubiera sanción por incumplir la legislación. «Hicieron bien, y yo también voy a cumplir con mi obligación». El presidente del Gobierno recordó que los socialistas hicieron dos amnistías fiscales, en 1984 y 1991, con dos diferencias –puntualizó–: que Hacienda no conocía los nombres de los que se acogían a ella y que no tributaban nada.

Rajoy se defendió también de la ofensiva de la oposición con las cifras de la gestión de su Gobierno en materia de lucha contra el fraude. En esta legislatura han aflorado 124.000 millones de euros y entre 2012 y 2014 se recaudaron 34.875 millones, a los que hay que sumar 2.889 millones del primer trimestre de 2015. «Aquí no hay pérdida de calidad democrática, pero sí pérdida de calidad en la oposición democrática en nuestro país», le echó en cara al jefe de la oposición en su rifirrafe dialéctico.

Sánchez había iniciado su turno de palabra afeando a Rajoy la pérdida de calidad democrática de las instituciones. Reprochó al presidente del Gobierno que haya nombrado «a dedo» al director de RTVE, que nombrara para el Tribunal Constitucional (TC) a un catedrático que «teorizaba sobre la reforma laboral» del Gobierno y militante del PP y que Hacienda haya «obstaculizado» la investigación de la «trama Gürtel». «España es un país con instituciones fuertes, democráticas y que funcionan», le espetó Rajoy. El presidente le recordó que cuando ellos gobernaban, el PSOE también nombraba al director de RTVE, y que el sistema de designación de los magistrados del Tribunal Constitucional no ha cambiado, y está consensuado con los socialistas. «La actual composición del TC y del Consejo General del Poder Judicial se sustenta en los votos del Grupo Socialista. Si no está de acuerdo, ¿por qué apoyó entonces esos nombramientos?», preguntó al líder del PSOE.

En la misma línea que Rajoy se manifestó la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en respuesta al portavoz del Grupo Socialista, Antonio Hernando. La vicepresidenta defendió que «la amnistía fiscal se ha hecho aplicando la Ley» frente a la opacidad y la falta de control de las que impulsaron los gobiernos socialistas. «Este Gobierno ha hecho una amnistía fiscal aplicando la Ley y ha hecho una amnistía fiscal muy diferente de las dos que hicieron los gobiernos del PSOE, que eran opacas, sin control y dando intereses a los defraudadores», sentenció. También retó al portavoz socialista, Antonio Hernando, a explicar cómo actuó el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero con la denominada «lista Falciani». «Saque menos fotos y tome más decisiones porque tiene usted importantes fotos con diputados de su bancada también afectados por investigaciones judiciales», sentenció, después de que Hernando exhibiese en el Hemiciclo una foto de Rato entrando en un coche policial y otra de Rajoy y Rato, abrazados.