El Supremo frena las aspiraciones de Castilla-La Mancha sobre el Tajo

MURCIA- «Nosotros creemos que el agua es un recurso escaso y necesario, pero también es un recurso de todos y, por lo tanto, si es de todos, los ríos no pueden estar dirigidos, ni gobernados por una autonomía en particular, sino que deben estar gobernados por la Administración central, que es la administración de todos». Con estas contundentes palabras se manifestó el consejero de Agricultura y Agua de la Región de Murcia, Antonio Cerdá, tras conocer el fallo del Tribunal Supremo, en el que se dictamina que las aguas del Tajo discurren por varias autonomías y, por ello, establece que los trasvases al Segura no deben estar condicionados a la Ley de Impacto Ambiental de Castilla-La Mancha. Se trata de un nuevo pronunciamiento que desestima el recurso castellano-manchego contra el desembalse de 44,5 hectómetros cúbicos, aprobado por el Gobierno central hace dos años.

Ante esta resolución, el titular de Agua celebró ayer que se recupere el «sentido común» con las reiteradas sentencias que dictan los tribunales, en concreto el Supremo y el Constitucional, sobre las competencias del agua.

A penas media hora después de que comenzará el Consejo Nacional del Agua, se conoció la sentencia del Tribunal Supremo, con la que se pone freno a las aspiraciones de Castilla-La Mancha y las reacciones no se hicieron esperar. La primera en pronunciarse fue la ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, quien se mostró algo prudente, «vamos a dar los pasos que debemos dar desde la responsabilidad, desde el rigor y desde el cumplimiento a la sentencia». Mientras que Cerdá, con algo más de firmeza, resaltó que «algunas comunidades creen que los ríos y los trasvases son suyos, y que pueden hacer con las leyes lo que quieran, sin embargo, después, están los tribunales que desestiman todo esto y lo tiran por el suelo y, por lo tanto, ya deberían aprender porque son muchos los varapalos que se están llevando en este sentido».

Aún así, los castellano-manchegos están dispuestos a compartir la gestión con otras comunidades autónomas, pero no con Murcia. «El Tajo es un río que no afecta a la Comunidad murciana, es un río que atraviesa Castilla-La Mancha, Madrid y, principalmente, Extremadura y, por tanto, entendemos que la Región de Murcia no debe opinar y no tiene que tener ninguna participación con respecto a un río que no es parte de su cuenca», aseveró el consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda castellano- manchego, Julián Sánchez Pingarrón.

Por su parte, el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, José Manuel Claver, apuntó que «creemos que esos pronunciamientos van a tener una repercusión importante en lo que respecta al próximo Plan Hidrológico del Tajo y, a frenar los deseos imperialistas de Castilla-La Mancha sobre el río».

Consejo Nacional del Agua
El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, denunció la política de «improvisación continuista» del Gobierno de España y defendió que el «único consenso» en materia de agua «es el Plan Hidrológico Nacional que sirva al interés de todos». Igualmente, defendió ante el Consejo Nacional del Agua «una visión única de Estado que resuelva de una vez por todas el problema nacional del agua». Cerdá realizó estas declaraciones a los periodistas tras asistir, junto al director general del Agua, Miguel Ángel Ródenas, a la reunión del Consejo, que presidió la ministra de Medio Ambiente.

El consejero indicó que tras siete años de Gobierno socialista «no se ha aportado ninguna solución al desorden hidráulico que hay en España» y lamentó que «continúan los mismos errores» porque el Ministerio «apuesta por una política continuista» que respalda la desalación como solución al déficit hídrico.

Los regantes de España piden al Consejo del Agua firmeza para que se cumplan las sentencias
Las últimas sentencias del Tribunal Constitucional, negando a Andalucía y Castilla y León la exclusividad sobre el río Guadalquivir y el Duero, respectivamente, también estuvieron presentes en la primera reunión, después de dos años de silencio, del Consejo Nacional del Agua. En el encuentro, todos los regantes de España pidieron al Consejo firmeza para que se cumplan las sentencias. Asimismo, desde la Región de Murcia se espera que esta reunión sirva para poner orden al caos hídrico, tras siete años de gobierno socialista y, que se trabaje para conseguir una autoridad hidrológica y un Plan Nacional que sirva para el interés de todos.