Una falsa polémica de siete centímetros

Según fuentes sindicales, en el año 2000 Air Nostrum decidió que sus trabajadoras debían vestir siempre con falda y, matizan que aunque hace once años debía ir «por debajo del hueso de la rodilla», ahora, tras una actualización de los uniformes, se ha recortado «cinco centímetros por encima de las rodillas». Nada más lejos de la realidad. Ante estas acusaciones, Air Nostrum reaccionó por la tarde: «No sólo no se ha recortado la altura de dicha prenda, sino que en diciembre de 2007 se alargó su longitud siete centímetros, hasta justo por debajo de la rodilla». Como prueba, la aerolínea, que opera como franquicia de Iberia, facilitó las imágenes del antiguo y el nuevo uniforme de su personal. Además facilitó el manual de uniformidad que tienen las 326 tripulantes de cabina de pasajeros de la compañía, textualmente se cita: «El largo de la falda será justo por debajo de la rodilla considerándose incorrecto cualquier otra medida». La compañía ha sentenciado que «las mujeres que trabajan en otros departamentos, como pilotos o técnicos de mantenimiento, visten obligatoriamente pantalones». Air Nostrum se defiende así de las denuncias del sindicato que les acusó de «una clara manifestación de discriminación sexista».