El PP fuerza a Trias a congelar el IBI para apoyar las ordenanzas fiscales

Barcelona- El gobierno de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona sacó ayer adelante su propuesta de ordenanzas fiscales para 2012 gracias al apoyo del PP. Los convergentes aceptaron la condición impuesta por los populares de congelar el incremento previsto del IBI del 3 por ciento.
Las negociaciones se han sucedido a lo largo de la semana y el martes pasado el gobierno convergente se desmarcó con una propuestas de ordenanzas en las que el mencionado impuesto pasaba del 0,75 al 0,77 por ciento. El presidente del grupo del PP, Alberto Fernández, señaló posteriormente que subir el IBI era «una línea roja» que no se podía traspasar si se quería que su partido diera ayer «luz verde a las ordenanzas», como finalemente sucedió.
En la comisión de Economia, la teniente de alcalde Sònia Recasens señaló que «el gobierno acepta la condición y no subirá el IBI el 3 por ciento después de una reflexión profunda y porque estamos convencidos de que esto dará luz verde a un proyecto de ordenanzas fiscales que es positivo». Recasens añadió que la congelación del gravamen se puede asumir porque se ha decidido «afinar al máximo el presupuesto» y «reducir el gasto corriente con políticas de máxima contundencia».

«Estímulo fiscal»
Durante el debate en la mencionada comisión, el concejal del PP Javier Mulleras puntualizó que el suyo es un voto favorable «al inicio del periodo alegaciones», en el que piensan participar, y que el PP «vota a favor en virtud de la aceptación de la anulación de la subida del IBI». No en vano, las ordenanzas deberán votarse definitivamente en el pleno que se celebrará el próximo 28 de octubre. Mulleres explicó que espera que los votos del PP influyan para ejecutar un cambio nítido de prioridades tras 32 años de gobiernos socialistas: «Tenemos la oportunidad de cambiar la tendencia para poner la hacienda pública al servicio ciudadano y pasar de la asfixia fiscal al estímulo fiscal».
El PSC, por su parte, anunció que, ante la falta de tiempo para analizar las ordenanzas, se reservará el voto hasta el pleno. Mientras que ICV-EUiA apuntó que votarán en contra. La nota discordante fue protagonizada por la ausencia del grupo que conforman Jordi Portabella y Joan Laporta, Unitat per Barcelona, ya que ninguno de sus miembros acudió a la comisión.
Así las cosas, tras certificar la congelación del IBI, el resto de ordenanzas fiscales pasan por conceder la gratuidad del área verde a aquellos residentes sin multas, además de bonificaciones y beneficios fiscales para las empresas que generen empleo. Según los cálculos municipales, el Consistorio dejará de ingresar unos 600.000 euros en el área verde y beneficiará a un 70 por ciento de los 256.000 vehículos censados en Barcelona. No obstante, recuperará el montante con cambios tarifarios de la propia área verde, que subirá entre el 2 y el 2,6 por ciento; o de la zona azul, que se incrementará entre el 1,8 y el 4,1 por ciento, según la zona.
Las empresas podrán acogerse a una reducción del 20 por ciento sobre el impuesto de actividades económicas (IAE) siempre que incrementen un 10 por ciento o más la plantilla de indefinidos entre 2010 y 2011. La tasa de construcciones, instalaciones y obras también se actualiza de acuerdo con el IPC y pasará del 3,25 al 3,35 por ciento respecto al valor de la obra. Mientras que la grúa y el depósito de vehículos subirán un 1,5 por ciento.

Las claves de las nuevas medidas fiscales
- Tres de los principales tributos municipales de congelan como el IBI, el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) o la tasa de construcciones, instalaciones y obras. Se incrementan por encima del IPC la cremación y las turísticas del área azul.
- La propuesta incluye también bonificaciones y beneficios fiscales para las empresas que generen empleo, como una reducción del 20 por ciento sobre el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) por el incremento del 10 por ciento o más de la plantilla de indefinidos entre 2010 y 2011.
- El area verde de aparcamiento será gratuita para los residentes que no tengan ninguna multa, es decir, para un 70 por ciento de los 256.000 vehículos.