Cataluña

El PSOE se une al frente catalanista para aislar al PP y defender la inmersión

Otra vez la política de inmersión, otra vez la identidad, el catalán, el victimismo y el frente anti-PP. Se repite la historia cada periodo preelectoral. Nada nuevo por tanto en el Congreso a dos semanas de que se disuelvan las Cámaras. Todos los grupos parlamentarios, salvo el PP, llegaron ayer a un acuerdo para respaldar solemnemente, en forma de moción parlamentaria, el sistema educativo catalán «como garantía de cohesión social y de igualdad de oportunidades».

Representantes de las asociaciones lingüísticas muestran el borrador de la ley que pretenden que se apruebe
Representantes de las asociaciones lingüísticas muestran el borrador de la ley que pretenden que se apruebelarazon

Y que hace extensivo el apoyo a «la plena competencia lingüística y aprovechamiento escolar de todo el alumnado, tanto en catalán como en castellano a nivel oral y escrito, al final la etapa educativa obligatoria (ESO), tal y como demuestran los estudios comparativos que evalúan la calidad del sistema educativo catalán».

El texto era consecuencia de una interpelación parlamentaria defendida en la Cámara por ERC, pero fue sustituido, tras conocerse la reciente sentencia del TSJC, pero fue modificado por una enmienda transacción de los republicanos a su propia moción y que fue suscrita también por CiU, IU-ICV y el Grupo Socialista.

Los firmantes defienden también el derecho «a recibir la educación en catalán, de acuerdo a los que dispone el Estatut de Cataluña y las leyes y a que se utilice normalmente el catalán como lengua vehicular y de aprendizaje». Es más, manifiestan el derecho del alumnado catalán a no ser segregado en centros ni en grupos distintos por razón de su lengua habitual, de acuerdo con el modelo de conjunción lingüística, y a aquellos alumnos, cuya lengua habitual sea el castellano, y que se incorporen tardíamente al sistema educativo, gocen del derecho a recibir el apoyo especial si así lo requieren». Eso sí, de acuerdo «con lo dicho reiteradamente por el Tribunal Constitucional, es plenamente legítimo que el catalán sea el centro de gravedad en la escuela catalana, sin exclusión del castellano, de forma que se garantice su conocimiento y uso en Cataluña». Y por todo lo expuesto con anterioridad, la Cámara instaba al Gobierno a defender el modelo lingüístico vigente. Y es que el autor de la iniciativa, el independentista Joan Ridao, denunció un presunto «intento innoble del españolismo de acabar con la convivencia en Cataluña», además de un notable «hostigamiento de los Tribunales».

Lecciones al PP, ninguna
Pero lecciones de catalanidad, el PP, que votó en contra de la moción junto a UPyD, dijo «no aceptar ninguna». Y lo hizo en estos términos la catalana Dolors Montserrat, una auténtica revelación en este final de Legislatura, que denunció el uso partidista de la lengua. Con rotundidad, convicción y una puesta en escena que incluyó expresiones en lengua catalana para defender el uso del castellano en la escuela, pidió coherencia y rigor no sólo a los republicanos sino también al PSOE y a una ministra que bajo estas siglas «pasa revista a las tropas españolas por la mañana y por la tarde se declara nacionalista catalana».

El PP considera que el resultado de este texto difiere de la interpelación que le precede. «La enmienda es incongruente con la interpelación que Tardà defendió en julio y por tanto es un fraude procesal parlamentario», agregó.


Una ley para la libertad lingüística
Las asociaciones Galicia Bilingüe, Asociación por la Tolerancia, Fundación Círculo Balear, Plataforma por la Libertad de Elección Lingüística del País Vasco y la Plataforma Valenciana por la Libertad Lingüística se han unido para promover una ley contra la imposición de lenguas. Con esta norma pretenden evitar la «grave discriminación» que sufre el castellano en algunas comunidades. Por ello han presentado un borrador de ley en la que incluyen algunos principios que ya utilizan otros países europeos que cuentan con más de una lengua oficial. Estos principios son los de elección de la lengua vehicular en le enseñanza, el bilingüismo en la rotulación, información y documentación de los organismos oficiales, libertad de uso de lengua para los particulares y el acceso a las ayudas públicas en igualdad de condiciones sin aranceles lingüísticos.