Una docena de etarras preparados para «entregarse» en la Audiencia

MADRID- No está claro si esta medida ha sido autorizada por la «dirección» de ETA o se trata de iniciativas personales, avaladas, eso sí, por Batasuna.
Durante el alto el fuego de 1998-1999, el Ministerio del Interior, cuyo titular era entonces Jaime Mayor Oreja (el secretario de Estado, Ricardo Martí Fluxá), puso en marcha una iniciativa similar para que los «deportados sin procesos pendientes» pudieran volver al País Vasco y Navarra. Incluso fue habilitado un teléfono al que podían llamar los terroristas y sus familias para saber si tenían causas pendientes. Curiosamente, ese número sigue activo, pese al tiempo transcurrido. La medida se podía aplicar también a los etarras que tuvieran causas pendientes de «escasa entidad», siempre que la Justicia lo avalase. Aquella iniciativa fracasó. La «dirección» de ETA prohibió a los miembros de la banda que se acogieran a ella.

Además de los doce citados hay entre 200 y 250 miembros de ETA que no tienen causas pendientes, o que han prescrito, y que podrían adoptar en cualquier momento una decisión similar. El número de etarras huidos (por voluntad propia) o deportados (en función de acuerdos adoptados por España con Francia y terceros países, en especial de América) es de 348.

El número mayor es el de los que se esconden en Francia, 170; seguido de México, 42, y Venezuela, 31. En Cuba hay 13; Bélgica, 4; Cabo Verde, 3; Reino Unido, 3; Uruguay, 3; Panamá, 1;Portugal, 1; Santo Tomé, 1. Y sin poder determinar su localización, 75.

Las fuentes consultadas consideran que el número de etarras en activo se sitúa entre 100 y 150, de los que no llegan al medio centenar los que podrían integrarse en «comandos» de la banda para volver a atentar. Los otros cumplen otras funciones dentro de la organización criminal, aunque la inmensa mayoría se mantiene a la expectativa, dada la situación de «cese definitivo», que no de disolución y entrega de las armas.

Algunos de los terroristas que residen en México y Venezuela han rehecho su vida y contraído matrimonio con nacionales de estos países. En caso de ser solicitada la extradición, dificultaba y, a veces, impedía la entrega del etarra. Lo cierto es que tienen trabajo, hijos nacidos allí y otros tipos de vínculos. En estos casos, la decisión de regresar a España se hace más complicada y prefieren, al menos de momento, no iniciar los trámites para volver.

Detenido y puesto en libertad un etarra
La Policía francesa detuvo ayer en Bayona (Francia) al presunto etarra Ibai Peña, pero le puso de nuevo en libertad al haber caducado la euro-orden que se le aplicó, según fuentes de la lucha antiterrorista. Peña es el primer detenido tras el último comunicado de ETA. Se trata de un joven vitoriano, vinculado a actividades de violencia callejera, que fue detenido por primera vez en el año 2004.