Londres

Asad amenaza a Occidente

Advierte de que una intervención en Siria desataría un «terremoto» en la región

Retrato de Bachar al Asad en una manifestación en favor del régimen sirio
Retrato de Bachar al Asad en una manifestación en favor del régimen siriolarazon

Lejos de permitir que la «primavera árabe» traspase sus fronteras, Siria parece instalada en el más frío invierno. El presidente de Siria, Bachar al Asad, ha advertido a los países occidentales de que desatará un «terremoto» en Oriente Medio si interviene en el país. En una entrevista concedida al periódico británico «The Daily Telegraph», Asad admite que Occidente «va a acentuar la presión», aunque apela a que «Siria es diferente en todos los aspectos a Egipto, Túnez y Yemen. La historia es diferente y la política también».
Para el presidente sirio, su país «es ahora el centro de Oriente Medio, es una falla geológica y si actúas sobre el terreno, causarás un terremoto», declaró. «¿Queréis ver otro Afganistán o decenas de Afganistanes?», añadió. En este sentido, alertó de que «cualquier problema en Siria desembocará en un conflicto en toda la región» y aseguró que «seis días después [de que las protestas comenzaran], yo emprendí reformas. La gente se mostró escéptica sobre si las reformas podrían ser el opio del pueblo [sirio], pero cuando empezamos a anunciarlas, los problemas comenzaron a descender. Ahí fue cuando la corriente inició su cambio y empezó a apoyar al Gobierno».
Sin embargo, su versión de la historia de los últimos meses no coincide con los episodios de represión que dan la vuelta al mundo, ya que desde que estallaron las revueltas en el mes de marzo se han producido, al menos, 3.000 muertes, incluidas las de 200 niños, según la ONU. Asad reconoce que las Fuerzas de Seguridad del régimen han cometido «varios errores» en los primeros capítulos de los levantamientos, si bien insiste en que la situación ha mejorado a día de hoy. Tanto Naciones Unidas como la Liga Árabe y Occidente han condenado duramente y de forma reiterada la represión ejercida por las fuerzas del régimen.
El Gobierno británico instó ayer a las autoridades sirias «a frenar todo tipo de violencia de forma inmediata» y afirmó que su presidente ha perdido la «legitimidad» y no puede continuar representando a los sirios. Según colectivos de derechos humanos, la cifra de muertos en Siria ha aumentado tras anunciarse la muerte de Gadafi.