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2015 año límite de ejecución si se quieren evitar «perspectivas sombrías»
Valencia- El estudio «Efectos del Corredor Mediterráneo sobre la competitividad de la economía de la Comunitat Valenciana», elaborado por expertos de cuatro universidades diferentes por encargo de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) incide en las ventajas que proporcionará esta infraestructura a la economía, pero también en la necesidad de su ejecución en el horizonte 2015- al menos la parte valenciana- para evitar «perspectivas sombrías» para la región. Su construcción dentro del escenario indicado permitirá subir las exportaciones un 23,2 por ciento y el comercio exterior aumentará un 37,1 por ciento. Ambos factores contribuirán al crecimiento del PIB una media del 0,87 por ciento y a la creación de 17.900 puestos de trabajo (un 3,4 por ciento del desempleo actual). Sin embargo, si su construcción se prolonga más allá de 2020, se producirá una caída del 30,7 por ciento de las exportaciones, un retroceso anual del PIB del 0,25 por ciento y la destrucción de 22.450 puestos de trabajo. El motivo de estas preocupantes cifras es que se perderá competitividad frente a otras regiones.
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