Polonia

«Gasolsistema»

Después de 120 minutos de campeonato, España puede mirarse al espejo y empezar a reconocerse. Era lo menos que se podía exigir a un grupo que se ha topado en el amanecer del Eurobasket con tres selecciones de relleno: Polonia, Portugal y Gran Bretaña. Ante los anfitriones de los próximos Juegos Olímpicos, la Selección dio un paso adelante que se antojaba imprescindible para lo que se avecina en el cierre de la primera fase

Marc fue una pesadilla para el juego interior británico. Anotó 18 puntos
Marc fue una pesadilla para el juego interior británico. Anotó 18 puntoslarazon

Tras el descanso de hoy llegan Lituania y Turquía, por este orden. El bronce y la plata del último Mundial. Empieza el campeonato de verdad y a España, que ya se ha clasificado para la segunda fase, se le adivina otro color.

El aspecto más saludable de la Selección en todo el torneo llegó en el arranque del tercer cuarto. Antes el equipo había reincidido en los vicios de las dos primeras jornadas. Había problemas atrás, falta de puntería (2/14 triples al final), Gran Bretaña llegó a ponerse por delante en el segundo cuarto (19-21, min 12), Navarro tenía uno de esos pocos días en que no está, el banquillo no producía... España pudo correr en alguna ocasión, defendió a ratos, llevó el partido controlado y sin apuros, Rudy tenía vigilado de cerca a Deng, pero las diferencias al descanso eran casi ridículas (38-32).

No se trataba de revivir los fantasmas de hace dos años en Polonia ante el mismo rival. Por eso, Scariolo ordenó en la charla en los vestuarios cargar el ataque sobre el juego interior. Nadie tiene en todo el torneo una conjunción de talento y centímetros en la pintura como la que posee España. Los hermanos Gasol, además de ser muy buenos, buenísimos, son muy listos. Saben leer el baloncesto mejor que nadie con su tamaño. A Marc, el seleccionador le definió en LA RAZÓN como el «conocimiento del juego». A Pau, «el dominio». Ambos justificaron la descripción del técnico. Juego entre pívots, aclarados para que Marc anotase 12 puntos casi consecutivos, Pau añadió tres canastas más cuando su hermano decidió repartir protagonismo...
Si además, el equipo se empeña en defender todo es más fácil. Por primera vez se vio al grupo apretar atrás. No individualmente como hasta ahora. Defendieron todos y al mismo tiempo. Calderón es básico en ese apartado. Su actitud en cancha propia resulta contagiosa. Cuando se empeña, el rival puede terminar asfixiado. Así sucedió en una acción en la que el base británico consumió los cinco segundos de posesión y que significó la primera gran celebración del banquillo en el torneo.

Con una España comportándose por primera vez como lo que es, la defensora y máxima candidata al oro, el partido se rompió. Las diferencias se ampliaron por encima de los 20 puntos, pero quedaba otra cuenta pendiente. Ante polacos y portugueses, todo el mundo se fue con mal cuerpo al vestuario por sendos finales plagados de errores. Había que cerrar el partido con un regusto agradable. Todos, salvo Sada, anotaron y, aunque en más de una jugada hubo un pase de más, la impresión general es que «La Roja» está en plena fase de mejora. «Debemos seguir mejorando», comentó Scariolo. «Nos hemos sentido más cómodos», confesó Rudy. El más tajante fue San Emeterio: «Ahora ya no hay bromas». Mañana Lituania destapará el estado real de la Selección.