La Ciudad de la Justicia de prioridad a utopía en quince días para la Junta

Sevilla- Los sevillanos tendrán que recurrir al refranero gitano, que no quieren buenos principios para sus hijos, para no perder la fe desde el primer día en el nuevo Gobierno de la Junta de Andalucía. El nuevo consejero de Justicia e Interior, Emilio de Llera, ha tirado por tierra en su primera intervención el acuerdo programático enarbolado por PSOE e IU hace apenas quince días al admitir que la Ciudad de la Justicia de Sevilla «es un sueño» y poco más. En los tiempos que corren se agradece la sinceridad, pero ésta desnuda una estrategia vacía de la izquierda.
Bajo el epígrafe «Justicia, un servicio público ágil y de calidad», se detalla que dentro de los objetivos marcados en esta materia por el programa anunciado a bombo y platillo por la coalición se encuentra impulsar «el Programa de Modernización de sedes judiciales, completar la red de Ciudades de la Justicia y fomentar la implantación en Andalucía del modelo de Nueva Oficina Judicial, como conjunto de medios personales, materiales y tecnológicos para adaptar la Administración de Justicia a los nuevos tiempos y necesidades». Un mensaje idílico con el que ha chocado de bruces el nuevo consejero el mismo día que recibía su cartera de manos de su antecesor, Francisco Menacho. «La Ciudad de la Justicia está en el campo de la ciencia ficción», aseveró Llera, quien considera que «acometer una obra de esa envergadura parece razonablemente impensable» en estos momentos: «Hoy por hoy, va a ser muy difícil». Y es que, según sus palabras, primero habrá que analizar los grandes proyectos que estaban planteados y después darles orden de prioridad: «No soy quién para decir que esté completamente enterrado. La Junta solo llevará adelante los que sean más útiles, necesarios y realizables».
El Prado, Los Gordales...

La reacción desde el Ayuntamiento no se hizo esperar, sobre todo al recordar las innumerables ocasiones en que desde la Junta se ha reclamado a Zoido «que aclare dónde quiere la Ciudad de la Justicia». La última vez, el pasado 15 de abril. Por ello, al delegado de Urbanismo, Maximiliano Vílchez, le pareció «poco seria» la actitud de Menacho en los últimos meses. «Nos llama la atención que hasta hace poco nos pedían y exigían que dónde íbamos y queríamos ubicarla, y ahora el nuevo consejero lo primero que dice es que no hay dinero», recordó.

Cuestión de gestionar
No obstante, insistió en que el Gobierno municipal de Zoido está «abierto al diálogo» y dispuesto a «mantener las reuniones necesarias para lograr un acuerdo» para que un proyecto necesario para la ciudad «pueda comenzar a realizarse cuanto antes».

Por ello, Vílchez pide al nuevo consejero que la Ciudad de la Justicia sea «una prioridad», pues se trata de unas instalaciones que «llevan años reclamando juristas, abogados y procuradores». El Consistorio hispalense sostiene que se trata de una «obra completamente viable» siempre que se realice una «buena gestión y distribución de gastos».

La Ciudad de la Justicia se ha convertido en uno de los eternos debates de la ciudad. Cada consejero que ha pasado por la Junta desde 1997 ha tratado de impulsar sin éxito el proyecto. Mientras tanto, el mantenimiento del edificio puente necesario para albergar las dependencias cuesta casi 3 millones al año. La finalización del proyecto se dijo para 2010. Dos años después no se ha fijado ni su ubicación.