Barcelona

La comisión del pacto fiscal llega a su fin sin unidad de los partidos

«Una vez se haya salido de la crisis y tengamos ingresos fiscales será el momento de hablar de un nuevo sistema de financiación». Así se pronunció ayer el cabeza de lista del PP por Barcelona, Jorge Fernández, después de visitar la empresa Gutmar, ubicada
«Una vez se haya salido de la crisis y tengamos ingresos fiscales será el momento de hablar de un nuevo sistema de financiación». Así se pronunció ayer el cabeza de lista del PP por Barcelona, Jorge Fernández, después de visitar la empresa Gutmar, ubicadalarazon

BARCELONA – La comisión parlamentaria que estudia un nuevo modelo de financiación para Cataluña encara esta semana la recta final con la última de sus reuniones. El viernes se votará el informe y las conclusiones subsiguientes a las comparecencias que se han producido desde el pasado 3 de junio, fecha en que se inició la comisión. Hoy, todos los grupos presentarán sus conclusiones por separado y así podrán visualizarse los puntos de partidas de cada uno y los grados de coincidencia. En todo caso, será evidente la falta de unidad de los partidos catalanes.

Quienes sí que mostrarán su sintonía serán CiU y ERC, pues ambos están de acuerdo en que el nuevo modelo de financiación debe permitir a Cataluña recaudar, gestionar, inspeccionar y liquidar todos los impuestos, de tal manera que se puedan conseguir unos ingresos similares a los del País Vasco y Navarra. En cambio, PSC y PP no comparten la reivindicación de imitar el sistema de concierto, sino que abogan por desarrollar el actual modelo, supeditado a la Ley Orgánica para la Financiación de las Comunidades Autónomas (Lofca).
Las conclusiones de cada grupo no definirán al detalle el modelo fiscal, sino que más bien representarán sus ideas maestras y también su percepción de las aportaciones que han realizado los 38 expertos –la mayoría catedrátricos de economía y de derecho– durante las 48 horas de debates en comisión. Probablemente, lo que ha suscitado mayor división es la constitucionalidad de un sistema fiscal catalán parecido al vasco. Ha habido opiniones favorables y contrarias, así que hay argumentos a gusto de todas las partes.

En cualquier caso, la hoja de ruta que piensa seguir el Govern de CiU es la que redactó el Institut d'Estudis Autonòmics (IEA), que aconsejó reivindicar un nuevo pacto fiscal a partir de la reforma de la Lofca. Su opinión es que el nuevo sistema no tiene por qué perjudicar la solidaridad con otras autonomías, ya que el Estado puede incrementar su aportación de recursos al sistema de financiación común.

Tras la votación de las conclusiones este viernes, los trabajos sobre el pacto fiscal se congelarán, ya que el Parlament acordó que estos debates no debían trasladarse al hemiciclo hasta después de las elecciones generales. En todo caso, las conclusiones acabarán siendo ratificadas por el pleno mediante la votación de mociones o resoluciones.

Las posturas

CiU aspira a arrastrar a PSC y PP a sus posiciones, pero el propio portavoz del Govern, Francesc Homs, admitió ayer que actualmente es muy difícil hacerlo. El PP no tiene la intención de entrar a fondo en este debate ahora porque considera que lo primordial ahora es salir de la crisis y no diseñar una nueva arquitectura financiera.

El PSC, por su parte, defiende profundizar el actual modelo en un sentido federal, pero la verdad es que sus propuestas son completamente difusas aunque aseguran que el resultado puede ser similar al concierto vasco.

 

CiU, PSC y ERC

A por el concierto vasco

El Govern de CiU no ha detallado su propuesta en cifras, pero sí el concepto. Aspira a que Cataluña tenga un sistema similar al del País Vasco, recaudando y gestionando todos los tributos.

Pacto fiscal federal
El PSC no ha acertado a explicar con claridad su modelo. Joan Rangel asegura que con su propuesta se pueden obtener los mismos resultados que en el País Vasco.

Soberanía fiscal
ERC juega en este asunto un papel parecido al que jugó CiU en la redacción del Estatut. Quiere asegurarse que de Cataluña salga una reivindicación fiscal lo más ambiciosa posible.