Rita cogió su fusil

Y Rita Barberá cogió su fusil, político «of course», para reivindicar ante Rajoy y su partido que Valencia existe. La alcaldesa de España –le entusiasma la denominación– se levantó en armas para recordar que el PP valenciano también gana las elecciones y aporta a Rajoy y a su partido más votos y escaños que cualquier otro (1,2 millones y 19 diputados en 2008). Cual «Palleter» (sobrenombre con el que se conoce a Vicente Doménech, personaje popular y destacado en la Guerra de la Independencia y que fue el primero en alzarse contra los franceses en la capital del Turia), Rita recordó la semana pasada a Rajoy y a su partido que Cospedal, Rudi, Monago, Feijóo y demás recientes vencedores no son los únicos que les han colocado –a Rajoy y a su partido– en el lugar de privilegio que disfrutan. Barberá, con su declaración de encabezar la candidatura por Valencia en las elecciones generales del 20 de noviembre «para tener presencia y peso real en Madrid», alzó la voz para reclamar atención hacia lo valenciano. Más allá de que finalmente se ratifique en ese propósito, protestó al conocer que el PP nacional había organizado uno de sus encuentros en Málaga coincidiendo con el 9 de octubre, Día de la Comunitat Valenciana. «¿Es que no quieren que acudamos los valencianos a esa cumbre de Málaga?» se preguntaba. «Seguro que no se les ocurriría fijar ese evento el 2 de mayo, día de Madrid» afirmaba. «Ni saben siquiera cuál es la fecha de la Comunitat» lamentaba. Tanta razón tenía, que su reclamación fue atendida de inmediato y el evento de Málaga acabará el 8 de octubre, con tiempo para regresar a Valencia. El tiempo dirá si las palabras de Rita se limitaban a lo expuesto. Así es la vida.