La novillada mantiene alto el nivel ganadero en Albacete

La feria de Albacete sigue manteniendo un alto nivel ganadero, sobre todo, en cuanto a presentación. La novillada de El Cotillo y Hermanos Collado Ruiz fue también de nota en este aspecto. Además, varios de ellos con un notable comportamiento. Abrió plaza un novillo que salió queriendo comerse el capote y que en la muleta embistió con ganas, no dejando estar cómodo a David Galván que ni se fió ni se acopló nunca con él. Mató de un feo bajonazo. Empujó el cuarto hasta derribar al piquero y su montura apretando luego a Galván en el inicio de su faena. Le obligó a mover las plantas. Poco a poco el gaditano se fue asentando, pero no terminó de cogerle el ritmo en otro quéhacer intermitente.

Manseó el segundo en los primeros tercios, pero en la muleta fue siempre hacia adelante. Alberto Pozo tocó distintos palos en un trasteo entusiasta al que faltó un punto de reposo. Arriesgó mucho al banderillear al quinto, que le puso en muchos aprietos y con el que volvió a tirar de voluntad como principal argumento.

Hubo muchos capotazos en la lidia del primer novillo de Sergio Felipe, que debutaba ayer con picadores, y que evidenció firmeza con buenas maneras ante un astado remolón. Cerró plaza un ejemplar que por peso y hechuras podría haber pasado por toro, con el que el debutante no volvió nunca la cara y demostró otra vez saber lo que lleva entre manos toreando con temple hasta que su utrero se paró.

Tercera de feria. Se lidiaron novillos de El Cotillo y Collado Ruiz (3º y 5º), muy bien presentados y buenos, en general. David Galván, ovación y silencio tras aviso; Alberto Pozo, ovación y vuelta al ruedo tras petición; y Sergio Felipe, silencio y silencio con aviso. Tres cuartos de entrada.