Comunidad de Madrid

Los funcionarios a raya

Médicos de Atención Primaria verificarán las enfermedades y supervisarán la duración de las bajas.

El Gobierno ha derogado la posibilidad de despedir mientras se está de baja
El Gobierno ha derogado la posibilidad de despedir mientras se está de bajalarazon

Madrid- La crisis no da tregua y las cuentas se resisten a cuadrar. En las administraciones, los euros se cuentan uno a uno para buscar cómo se puede racionalizar el gasto público. Una tarea que, en el caso de la Comunidad de Madrid, ha dado como resultado la necesidad de reducir las bajas laborales de los profesionales de Sanidad, Educación y Asuntos Sociales.Y es que, estos tres colectivos suman cifras de absentismo laboral «elevadísimas», tal y como aseguró ayer el vicepresidente de la Comunidad, Ignacio González. En concreto, en Sanidad, los trabajadores acumulan una media de hasta 18 días de baja al año; mientras que en Educación y Asuntos Sociales se registran «picos» de absentismo del 30 por ciento del personal en un solo día. Por este motivo, el Gobierno regional ha decidido poner coto poniendo en marcha un Plan Especial de Inspección y Control de la Incapacidad Temporal. Un proyecto que en la práctica supondrá una vigilancia y supervisión de las bajas de los trabajadores públicos para evitar las prácticas abusivas y motivar al personal no absentista. El Plan lo desarrolarán los Cuerpos de Inspección Sanitaria, o más concretamente, médicos de Atención Primaria a los que se les encargará supervisar que no haya fraude. Para ello, la Comunidad ha desarrollado un protocolo que consta de varios niveles de control. En primer lugar se clasificarán las bajas por tipo de patología y por duración del proceso médico y se remitirán a los médicos de Atención Primaria. En cuanto al tiempo se supervisará que la baja no supere la media. Por ejemplo, si por un esguince se suele dar una media de 20 días de baja, el día 21 se contactará con el trabajador para conocer los motivos ampliación de la ausencia laboral. En cuanto a la patología, los médicos estimarán si ésta impide al trabajador desempeñar su cargo (volviendo al mismo ejemplo, un esguince sería compatible con un trabajo de despacho). Además, se creará una conexión entre los departamentos de recursos humanos de cada área y los médicos de atención primaria para los casos con un alto índice de absentismo laboral. De esta manera, cuando un trabajador con gran cantidad de ausencias laborales se de de baja, un doctor le citará de manera inmediata para confirmar la patología y, si fuera el caso, detectar el engaño. Pérdidas millonariasY es que, el absentismo laboral genera pérdidas a las arcas regionales de millones de euros. Según explicó Ignacio González, sólo en el área de Sanidad, la Comunidad podría ahorrarse con este sistema 20 millones de euros. Y es que, en 2009, los 18 días de media de absentismo que registraron los profesionales del Servicio Madrileño de Salud supuso un gasto de 207 millones de euros, que incluyen los costes de la prestación de Incapacidad Temporal y los costes de sustitución de ese profesional. En el caso de la Consejería de Familia y Asuntos Sociales, el absentismo global está próximo al 19,5%, llegando incluso al 30% en determinadas categorías. Y según estima la Consejería de Educación, el absentismo alcanza entre sus trabajadores el 25%. El Plan fue presentado el pasado 16 de abril a la Mesa Sectorial donde no se hicieron observaciones