Sevilla
«Dejo el Consistorio infinitamente mejor que cuando llegué»
El Pleno, de un tiempo a esta tarde, quizás de siempre, se resume en una interminable sucesión de actos previsibles en los que cada partido respeta a rajatabla las costuras de un guión establecido. Da igual lo que argumente cada edil de una u otra bancada, el voto está decidido
No se debate, se escenifica. Un paripé, o sea, en el que sobresale alguna frase. El alcalde, que procura aparentar estar por encima de los terrenales concejales y no tomar la palabra, acaparó su minuto de gloria: «Este Ayuntamiento lo voy a dejar infinitamente mejor que en el momento en que lo encontré».
El PP denunció que se aprobara un libramiento de más de seis millones de euros, hasta 34 expedientes, por «la incompetencia e improvisación». La vehemencia de Monteseirín llenó de silencio su alrededor. Es lo que sucede cuando hay un giro de guión: el público presta atención. El regidor respondió a las críticas del popular Gregorio Serrano, que le espetó lo «sorprendente» que resulta que «un alcalde al que le quedan cuatro plenos explique ahora esto (la utilización de los reconocimientos de crédito) después de doce años». «Ya está bien», indicó el alcalde, después de que el delegado Francisco Fernández recordara que en el último Pleno con el PP al frente, en 1999, se aprobaron 31 expedientes. «Sí, pero por valor de 24 millones de pesetas, no de seis millones de euros», apuntó Francisco Pérez, que señaló que «en tres años se han gastado el 25% del fondo del Plan General» para 20 años.
«Dicen que me quedan cuatro plenos, pero llevo 140 a la espalda. Yo no he criticado que en otros ayuntamientos se hagan estos reconocimientos de crédito cuando no hay más remedio porque hay que dar respuestas a los ciudadanos. Tampoco que cuando estuvieron (los populares) en el cargo los hicieran», dijo Monteseirín, acusando al PP de «filibusterismo». «Este Ayuntamiento lo voy a dejar infinitamente mejor en lo económico, derechos, personal, equipamiento, servicios y atención», aseguró. «Nos hemos complicado la vida con muchas obras, decían. Si no, a ver cuándo se iban a acometer. Prefiero que me critiquen por lo que hago, no por lo que dejo de hacer», finalizó el alcalde a cuya espalda, a lo Napoleón –que también fue «desterrado» de su imperio–, 140 plenos le contemplan.
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