José Antonio Sánchez: «Ahora mismo soy hombre de esperanza»

–¿Le ha dicho a su esposa «no te imaginas, querida, la cantidad de españoles que podrían ser directores generales de Telemadrid»?
–No, es lo suficientemente inteligente para saberlo.

–Fue director general de RTVE, director de Cadena Ibérica, director general de Coordinación Institucional Internacional de Telefónica... ¿Al dar a luz su madre dijo: «Mira, hemos tenido un director general»?
–No lo creo, mi madre nunca imaginó que llegaría a tanto.

–¿Qué le ha prometido por los bajinis a Esperanza Aguirre?
–Trabajo, dedicación y esfuerzo. Y le he agradecido el honor que me ha hecho.

–Se ha declarado férreo defensor de la televisión pública. No sé si estos tiempos de caos y confusión son propios para ser férreo defensor de algo...
–Tiene razón. Pero creo que hay que defender la televisión pública porque mantiene la cohesión nacional.

–Esperanza Aguirre y María Dolores de Cospedal son férreas defensoras de la privatización de las televisiones autonómicas...
–La posibilidad de privatización, cuando llegue, dependerá de cada comunidad. Si no pierden dinero, no hay por qué privatizar. Si lo pierden...

–¿Usted llega con la estaca de la rebaja?
–Estoy con el recorte; estamos restringiendo presupuestos.

–Lo original habría sido que le hubieran nombrado director de la tele de una comunidad del PSOE...
–Habría sido muy original, sí, pero yo no hubiera aceptado.

–Paolo Vasile dijo que Belén Esteban es la inspiradora del 15-M...
–No creo que lo sea, pero Paolo es un gran profesional de la televisión.

–Berlusconi dijo: «Me voy de esta mierda de país». ¿Tendría éxito en un programa televisivo?
–Creo que tendría un éxito efímero. Y eso pese a que canta.

–Dígame eso tan bonito de que sólo ve informativos, debates políticos y documentales de la 2...
–No se lo digo porque no es verdad: veo mucho cine, series...El fútbol no lo veo, no soy aficionado; prefiero los toros. Y a «Sálvame» le he echado alguna ojeada haciendo zapping.

–¿Es hombre de fe o de esperanza?
–De ambas cosas. En este momento soy hombre de esperanza.

–Claro. ¿La esperanza es lo último que se pierde?
–No la voy a perder nunca.

–«La esperanza es el sueño del hombre despierto» (Aristóteles).