Cataluña

El PP recupera en Cataluña el discurso de la identidad nacional

«El PP echa en falta la defensa de la soberanía española por parte del Gobierno»
«El PP echa en falta la defensa de la soberanía española por parte del Gobierno»larazon

Otros tiempos, otro escenario político y una lógica vuelta de tuerca a la estrategia para ganar votos. Los intentos de última hora del PSC de envolverse en la bandera de España para borrar sus coqueteos nacionalistas han sido el acicate definitivo para que el PP se libere de complejos que en el pasado pudo exhibir y apueste por una campaña electoral en la que insistirá e insistirá en el mensaje de que es un partido con un proyecto nacional, que cree en una Cataluña integrada en la España constitucional y en lo que de ahí se deriva: dos lenguas, dos banderas...

Si en un principio el laboratorio de estrategias del PP pensó que debía primar el mensaje económico para volver la crisis contra la cara del tripartito y de José Montilla, hoy ya, sin embargo, asume que el eje identitario va a estar muy presente en la campaña y que a ellos no les conviene rehuirlo, sino, al contrario, jugar fuerte la baza de presentarse como único partido que cree en Cataluña y en España.

Esta idea se traducirá en imágenes de la presidenta y candidata, Alicia Sánchez-Camacho, con la «flor y nata» de la dirección nacional; y también afectará al mensaje. No es casual que Génova esté preparando ya una reunión de todo el Comité Ejecutivo del partido en el feudo catalán, coincidiendo además con la convocatoria formal de las elecciones. En principio, la idea es que esa foto de familia en Cataluña se tome el próximo día 4.

Todo se está analizando al milímetro para sacar la mayor ventaja electoral y de ese análisis ha salido la decisión de que Rajoy, a diferencia de lo que hizo en Galicia, no tenga una caravana electoral propia. Los populares han hecho cálculos y quieren evitar que el líder nacional y la candidata se solapen, lo que no implica que el primero no vaya a tener una presencia muy significativa. ¿Se invitará a todos los dirigentes? ¿También a aquellos que en las anteriores elecciones resultaban incómodos para la dirección del PP catalán que entonces comandaba Piqué? La respuesta de Madrid es pura corrección política. «Decidirá el PP catalán, pero es lógico que se eviten discursos que animen debates que no nos convienen». Queda dicho.