Propuestas para el diálogo

Valores para la superación personal
«No extraña en absoluto que este encuentro haya despertado tanta expectación. El humanismo en el siglo XXI interesa mucho en una época convulsa cargada de incertidumbre. Al menos a una servidora que rechaza el materialismo y ha temido siempre la «cosificación» humana. Aunque jamás me gustaron las etiquetas, me considero humanista porque lo más importante son las personas, que deberían estar por encima de razas, religiones, fronteras, ideologías… y también en tanto que creo que la persona debe ser responsable de sí misma y por ende de su devenir. Me interesa un debate que hable abiertamente de los valores, claves en cualquier sociedad, con el deseo de que se pongan en alza y se analice el daño causado por actuar de espaldas a ellos. Viví esos indolentes pasos con personal sufrimiento. Por ejemplo: la traición a la sociedad, a las víctimas del terrorismo y al Estado de Derecho cuando se destruyeron valores hasta aquel momento inquebrantables: memoria, dignidad y justicia, por escuchar a los asesinos. Tampoco olvidamos que una institución en cuyos principios y valores está la clave de la felicidad, como es la familia, fuera infravalorada alarmante e injustamente. Como si los valores que debe inculcar: bondad, solidaridad, honestidad, sacrificio... sobraran. Desde luego que sobran para poder abortar sin remordimientos... Ojalá se reconozcan errores y que los valores reportan éxito y superación personal y triunfo de la sociedad».
Irene Villa / Víctima del Terrorismo
 

RECUPERAR EL ESFUERZO O LA RESPONSABILIDAD INDIVIDUAL
«Durante los últimos años, en España ha existido una política dirigida a desacreditar y, finalmente, arrumbar un conjunto de valores. Lamentablemente, lo han conseguido en cierta medida. Valores como el patriotismo, el esfuerzo o el sentido de la responsabilidad individual tienen mucho menos peso que hace ocho años. Lo que se ha propuesto a cambio no proporciona consistencia a nuestra sociedad. Sólo queda un rastro de pobreza y tristeza, imposible de imaginar hace menos de una década. Creo oportuno que se debata sobre ello. Y pienso que sin esos valores del humanismo occidental nuestra nación caminará sin rumbo».
Javier Fernández-Lasquetty / Consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid

 

IGLESIA, SOCIEDAD Y CIUDADANÍA
«Lamentablemente, coincido con las reflexiones del filósofo Toynbee: la civilización occidental se encuentra sumida en una profunda crisis. Por eso, hablar sobre humanismo y valores supone una reflexión imprescindible para recuperar nuestra esencia: el humanismo nos une, y la moral también. Algunos de los temas a tratar y que afectan a la Iglesia deberían ser la presencia y el papel de esta institución en el mundo; la laicidad y el proceso por el cual se desarrolla, o cómo puede colaborar la Iglesia para mejorar la sociedad, no sólo hablando del Evangelio en las homilías, sino tratando los temas que preocupan a los ciudadanos. Por parte de Zapatero, sería interesante tratar la regeneración política: ¿por qué, en vez de ser una solución para los ciudadanos, los políticos han pasado a ser un problema? Se trata de una gran iniciativa, que reúne a dos personas muy distintas pero que pueden tener nexos de unión».
Pedro Núñez-Morgades / Diputado del PP en la Asamblea de Madrid