Actualidad
Liberados con nombre y apellidos
La Comunidad crea un registro de liberados sindicales para controlar el uso de las horas de liberación. Hasta ahora, los sindicatos podían cambiar a sus representantes sin dar cuenta a la Administración
MADRID- La Comunidad de Madrid se ha propuesto arrojar luz sobre la «opacidad» que rodea a los liberados sindicales. La presidenta regional, Esperanza Aguirre, quiere incluir un mecanismo de control sobre estos representantes sindicales que cobran íntegra su nómina de la Administración regional, pero están exentos de acudir a su puesto de trabajo, ya que se dedican de forma parcial o exclusiva a la labor sindical. En concreto, la Comunidad va a crear en los próximos días un registro de liberados sindicales que recogerá el nombre y apellidos de cada uno de ellos y las horas de liberación sindical de las que hacen uso.
Este registro forma parte de una «campaña» de control que el Gobierno regional puso en marcha en 2010 y que obligó a los sindicatos a revelar, por primera vez en 2011, el número exacto de liberados que tenían en la Administración regional, y que posteriormente supuso la firma de un pacto con las centrales por el que se ha reducido en un 70 por ciento las horas de liberación.
Aunque todos ellos cobran del erario público, en la actualidad no existe un registro en el que estén recogidos quiénes son y de qué manera hacen uso de las horas sindicales que, por Ley, se conceden a los comités de empresa y delegados de personal.
Descontrol
La falta de este registro no sólo impide que los empleados públicos y los funcionarios puedan conocer quiénes son los «compañeros» que les representan y por tanto a quién dirigirse; sino que además supone un descontrol sobre lel uso de las horas sindicales. Los sindicatos tienen la posibilidad de «concentrar» o «acumular» las horas sindicales para que haga uso de ellas una sola persona (y por tanto que ésta esté exenta totalmente de trabajar en su centro) o «distribuirlas» entre diferentes trabajadores, para que hagan uso parcialmente de estas horas. Sobre la fórmula que escogen en cada momento tampoco hay conocimiento. Por este motivo, el hecho de que actualmente no exista un registro en el que esté reflejado quiénes son y de qué horas cogen, permite que puedan cambiar sin comunicarlo el uso de estas horas.
De esta manera, un día puede haber un número concreto de trabajadores liberados a tiempo completo y al día siguiente, y sin dar cuenta, éstos se sustituyan por el doble de trabajadores, pero liberados sólo a media jornada.
Por este motivo, las cifras sobre estos trabajadores bailan casi de un día para otro, con los problemas que generan en el día a día de la Administración, así como en la sustitución de muchos de ellos por interinos.
El «libertinaje» ha llegado al punto de que los liberados no siempre cogen las horas que lescorresponden a su centro de trabajo. Es decir, las horas se «intercambian» y «acumulan» entre trabajadores de distintos centros, áreas e incluso tipos de trabajadores, ya que, en la Comunidad, no todos los empleados se rigen por el mismo convenio, y por tanto, lo que se necesita negociar por ejemplo para los funcionarios de la Administración y Servicios no es igual a lo que pueda necesitar el personal laboral, el estatutario, el docente o los de Justicia, cuyos regímenes son todos diferentes.
Un registro público o interno
El registro que ya tiene listo la Consejería de Justicia y Presidencia fue pactado con las centrales en febrero de 2011 en el Acuerdo para la estabilización de las relaciones laborales, contendrá la relación de personas liberadas, tanto a tiempo completo como parcial, y únicamente podrá ser modificado cada seis meses; es decir, dos veces al año, con lo que se impedirá ese «descontrol» en el uso de las horas de liberación. En la actualidad, el registro se encuentra en «periodo de consulta» con la Agencia de Protección de Datos que deberá determinar si será únicamente de uso interno o público.
Después de que la Comunidad pactara con los sindicatos, el pasado mes de febrero, la reducción en un 70 por ciento de las horas de liberación sindical, el número de liberados a tiempo completo ha pasado de 3.464 a 712, más otros 1.134 empleados liberados sólo a tiempo parcial. La aplicación de este acuerdo y por tanto la incorporación de más de 2.752 trabajadores, que hasta entonces sólo trabajaban para el sindicato, permitió un ahorro a las arcas regionales de 72 millones.
Control sindical en tres pasos
1.- La «desclasificación» de la cifra
En septiembre de 2010, en el Debate sobre el Estado de la región, Esperanza Aguirre convoca a los sindicatos para ajustar el número de horas de liberación sindical a lo que marca la Ley. En aquel momento los sindicatos acumulaban 75 horas mensuales por delegado, casi el doble de las 40 que marca la Ley.
2.- Reducción de horas
Tras meses de delilberación, la Comunidad pacta en febrero de 2011 la reducción en un 70% de las horas sindicales. La medida supone que de los 3.464 liberados a tiempo completo se pasa a 712, y otros 1.134 «parciales». El resto se incorpora a trabajar a su antiguo puesto el 1 de septiembre de 2011.
3.- El registro
En los próximos días, la Comunidad de Madrid creará un registro en el que quedarán reflejados los trabajadores que hagan uso de las horas de liberación sindical. Este registro sólo se podrá modificar dos veces al año, lo que evitará el «intercambio» de horas liberadas entre trabajadores.
✕
Accede a tu cuenta para comentar