Reunión de hechos consumados con los sindicatos sin la consejera Aguayo

SEVILLA- Las casi tres horas de reunión entre altos cargos de la Consejería de Hacienda y Administración Pública y representantes de los tres sindicatos con voz en la Mesa General (CSIF, CC OO y UGT) dieron para poco más que una lectura en voz alta del Plan Económico (2012-2014) que aprobó el jueves el Gobierno en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF). El de ayer fue un encuentro de hechos consumados porque ya es practicamente imposible deshacer los recortes aprobados por Madrid.

La Junta, pese al rechazo sindical, no está dispuesta a mover las líneas principales del plan. Una de ellas, la más polémica, la eliminación a los empleados públicos de los complementos específicos de las pagas extras de junio y diciembre, así como el recorte del 10 por ciento de las percepciones variables. Un «tijeretazo» que supondrá una bajada de sueldo de en torno al 5 por ciento de media. En el caso de los interinos, un 15 por ciento.

Pese a la excepcionalidad del recorte, la consejera del ramo, Carmen Martínez Aguayo, no participó en la reunión, convocada estratégicamente en la Dirección General de Recursos Humanos y Función Pública, y no en la sede de Torretriana, escenario de una multitudinaria protesta cuando Martínez Aguayo –en aquella ocasión sí acudió a la Mesa General– sacó adelante con CC OO y UGT el segundo «decretazo» de la reordenación del sector público. Ayer delegó en un grupo de altos cargos encabezado por el secretario general para la Administración Pública, Manuel Alcaide.

La Junta pidió propuestas creativas a los representantes sindicales. El presidente de CSIF-A, José Luis Heredia, propuso abrir la vía de François Hollande en Francia, con un recorte del 30 por ciento del sueldo de los altos cargos, tanto en la Administración como en la empresas públicas; además de la disminución progresiva de la nómina de los 109 parlamentarios; el adelgazamiento de la denominada «administración paralela» (el conjunto de empresas que ha permitido la entrada por la puerta de atrás de 20.000 puestos «a dedo»); o el recorte en gasto suntuario como coches oficiales –hay en torno a 300 y la Junta se ha comprometido a dejarlos en la mitad– o telefonía móvil – existen 36.000 terminales–. La Junta se negó a meter la tijera en este terreno. El plan de reequilibrio sí recoge una reducción del 5 por ciento del sueldo del presidente de la Junta, consejeros, viceconsejeros y personal asimilado, que se suma al 15 por ciento de recorte previo.

CSIF, por tanto, manifestó su rechazo rotundo a las medidas. La responsable del área de Función Pública de este sindicato, Alicia Martos, también presente en la reunión, aseguró a este periódico que «hay muchas partidas en las que recortar antes de meter la mano de nuevo en el bolsillo de los empleados públicos. Han optado por apretar el botón, que es lo más fácil». El sindicato sigue adelante con sus movilizaciones previstas para el lunes y el día 29.

Por su parte, el coordinador del área pública de CC OO-A, José Blanco, mostró a LA RAZÓN el rechazo del sindicato a las medidas de recorte «lesivas para el empleo público y los servicios básicos». CC OO reclamó una negociación «real, más en profundidad» y que el plan se tramite en la Cámara autonómica como Proyecto de Ley. La Junta aún no ha decidido qué fórmula legal adoptará.

Hacienda ha dado de plazo a los tres sindicatos hasta el lunes a las seis de la tarde para que aporten propuestas. CSIF y CC OO no las van a presentar. El secretario general de FSP UGT-A, Antonio Tirado, sí las entregó ayer sobre la marcha. Una de ellas es que la Junta adquiera un compromiso de ley de la recuperación de cada una de las medidas que afectan a más de 260.000 empleados públicos andaluces.

Los manifestantes comienzan el ensayo
Un grupo de empleados públicos se concentró a las puertas de la Dirección General de Recursos Humanos y Función Pública, en la capital hispalense, donde tuvo lugar la reunión de la Mesa General. Con pitos, pancartas y protestas al plan de ajuste saludaron a los miembros de la Consejería de Hacienda y Administración Pública que entraron al cónclave. Se prolongó casi tres horas. La Junta evitó exponerse a una convocatoria en Torretriana, sede de la Consejería de Hacienda, donde los funcionarios se han manifestado masivamente en múltiples ocasiones.
 

Veto al grupo de sindicatos que encabeza Safja
La federación compuesta por el Sindicato de Funcionarios de la Junta (Safja), de profesores de instituto Apia, de enfermería Usae, Anpe, de educación, y SAM, de médicos de Andalucía, reclamaron ayer su derecho a estar presentes en la Mesa General. Lo estarían, esgrimen, si se hubiera actualizado el reparto después de las últimas elecciones sindicales. A las puertas de la Dirección General hicieron sus críticas al plan y se sumaron a las movilizaciones del día 29.