El alto precio del tabaco

VALENCIA- El primer cigarrillo, a los doce años y a los 16 llega el consumo estable. El tabaco es el enemigo a batir, el que causa más muertes al año, mucho más que los accidentes de tráfico. Cifras todas ellas que cada cierto tiempo lleva a recordar a los expertos lo nocivo que resulta este hábito. Y como las consecuencias sobre la salud no resultan suficientes para que los fumadores desistan, los médicos explican las repercusiones que tiene para el bolsillo. Según comentaron ayer el coordinador de la XI Semana sin Humo de la Comunitat, Joan Antoni Ribera, y el secretario del Colegio Oficial de Médicos de Valencia, José Antonio Monrabal, dejar de fumar es un tercio más barato que fumar, ya que el tratamiento trimestral completo cuesta 300 euros, que es lo que gasta cada mes un fumador en cajetillas.En este sentido, reclamaron un aumento en el precio del tabaco, pues, a juicio de la mitad de los encuestados, se trata de la medida más eficaz para reducir el consumo. Kilos temporalesEn cuanto a la estética, es secundaria. Admitieron que al dejar de fumar se suele ganar peso -la nicotina aumenta el gasto calórico y mantiene el peso de manera artificial-, pero «esos dos o tres kilos de más» se pueden frenar con un poco de dieta y aumentando el ejercicio. Así que para aquellos que deseen dejar de fumar, ahí van un par de consejos. Ante todo, debe ser una decisión voluntaria, luego elegir un día. También resulta práctico deshacerse de todo lo que le recuerde que fumó -ceniceros, encendedores...- y mientras dura el síndrome de abstinencia -los primeros meses son muy duros- evite salir de copas o el «cafetito» de media tarde. Cuantos más amigos sepan que ha dejado de fumar, mejor. «Pues si recae, habrá más gente que le recordará que no tiene palabra». Y si la tentación vuelve a llamar a su puerta, ignórela. «Un fumador es fumador para toda la vida. Prohibidas las caladitas».

Los hosteleros se rebelanLa prohibición total del consumo de tabaco en los lugares públicos supondrá «un claro beneficio» para la hostelería, dado que el 32 por ciento de los españoles dice que acudiría más a los locales de ocio si no se pudiera fumar en esos recintos, según una encuesta de los médicos de familia con la que coincide el Consejo de Enfermería de la Comunitat, que piden por ello, que se acelere «el endurecimiento» de la legislación sobre el tabaco para prohibir fumar en lugares públicos. Sin embargo, los hosteleros opinan lo contrario. Según la Federación Empresarial de Hostelería de Valencia, la modificación de la Ley antitabaco provocará el cierre de 400 negocios, la pérdida de 2.000 empleos.