Mas deja sin paga extra de Navidad a 350 altos cargos

Un día después de saber que septiembre deja 16.282 parados más en Cataluña, que los médicos reclamaran a Artur Mas que predique con el ejemplo y se baje también el sueldo, y de que las entidades sociales señalaran que la situación de pobreza actual no tiene precedentes desde la posguerra, el president de la Generalitat anunció que suprimirá la paga extra de Navidad a los 350 altos cargos del Govern.
Mas soltó la noticia en la sesión de control del Pleno del Parlament, durante la respuesta a la última pregunta que le tocaba hacer a la oposición. El PSC había reclamado al president que cumpla con los acuerdos votados mayoritariamente por el Parlament, pensando en una propuesta que insta al Govern a presentar los presupuestos de 2012 antes del 10 de octubre. Y Mas se las ingenió para revelar que «los miembros del Govern y los altos cargos no cobraremos este año la paga de Navidad». Fue un anuncio premeditado, para calmar los ánimos de los ciudadanos golpeados por la crisis y de los profesionales que están viendo recortados sus salarios por culpa de los ajustes.
La medida que dio a conocer Mas afecta a 350 personas, entre el president, los consellers, los secretarios, gerentes y directores generales. Fuentes del mismo Govern explicaron que permitirá ahorrar 1,8 millones de euros, teniendo en cuenta que los profesionales que se quedan sin extra de Navidad cobran una paga de 5.142 euros de media. Como colofón a su estudiado anuncio, Mas recordó que su equipo ya se recortó el sueldo un 15 por ciento el año pasado.
Para rematar la faena, la presidenta del Parlament, Núria de Gispert, abandonó unos minutos el Hemiciclo para informar de que analizará la posibilidad de dejar sin paga extra de Navidad también a los 135 diputados de la Cámara catalana, que es de unos 3.500 euros de media. De Gispert aprovechó la psicosis de anunciar recortes y más recortes, para avanzar que el Parlament «está elaborando un plan de choque que revisará capítulo por capítulo todo el gasto».

«Cuanto más tiempo se mantenga esto, peor para España y para los españoles»
- La controversia de los recortes se ha trasladado a Madrid de la mano de los diputados catalanes. El diputado de CiU en el Congreso, Josep Sánchez-Llibre, acusó ayer a la ministra de Defensa, Carme Chacón, de «inmoralidad» y de practicar el «juego sucio» por las críticas que realizó contra los recortes que la Generalitat aplica en la Sanidad. Recordó a Chacón que el PSC comandó la Generalitat los últimos años al frente del tripartito, «el auténtico responsable del caos de gasto público en Cataluña y de que el déficit sea del 4,2%». Sánchez-Llibre acusó a Chacón de practicar un «doble juego» porque los socialistas bloquearon el traspaso del fondo de competitividad.