Valencia

Fabra: «No prometo pleno empleo pero sí recuperar los que se llevó la crisis»

La Comunitat ya lo hizo antes y lo volverá a hacer. El jefe del Consell cree que la austeridad y el valor podrán con la crisis.

Fabra y el presidente del Club de Encuentro Manuel Broseta, Francisco Puchol, ayer en Valencia
Fabra y el presidente del Club de Encuentro Manuel Broseta, Francisco Puchol, ayer en Valencialarazon

VALENCIA- Si alguien hubiera pasado lista, y a buen seguro alguno lo hizo, hubiera comprobado que no faltaba nadie. La intervención del presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, ayer en el Club de Encuentro Manuel Broseta fue seguida por los miembros del Consell, del actual y del anterior, de los principales alcaldes y de los representantes de esa sociedad civil a la que animó a arriesgarse para salir de la crisis.

El discurso de Fabra, al que se le nota cada vez más cómodo en intervenciones de este calado, giró en torno a lo económico, pero fue también una defensa de la identidad valenciana. En lo financiero hizo especial hincapié en el papel que deben jugar las empresas en la recuperación. «Nadie se puede quedar al margen. Son momentos de ser valientes y arriesgar. No debemos conformarnos con las políticas de subsidio (...), hay que disminuir el gasto, pero también evitar las subvenciones para aumentar los incentivos».

Él, por su parte, «previsible» y «municipalista» como se autodefinió, fue prudente a la hora de las promesas. «No prometo pleno empleo, pero sí que vamos a recuperar todos los puestos de trabajo que la crisis se ha llevado».

En cuanto a las señas de identidad, a las que recurrió en numerosas ocasiones durante su intervención, reclamó respeto. «Uno de los retos para afrontar el futuro con garantías, es que se hable en positivo de la Comunitat Valenciana. Tenemos magníficas personas y necesitamos que se nos hable con respeto».

Un Fabra pausado repetía conceptos ante una audiencia tranquila. «Austeridad y más ajustes» se le oía decir. «Debemos ser ejemplarizantes y transparentes», señalaba a continuación. Nada de palabras exaltadas ni culpas excesivas al Gobierno central, sino un discurso de compromiso personal y una petición de ayuda. Es hora de los grandes sacrificios. «Es lo que han hecho desde siempre las familias y empresas valencianas».