Los créditos ralentizan su crecimiento hasta junio

Los datos recogidos por la Asociación Española de Banca (AEB) demuestran una ralentización en la concesión de créditos que coincide con la situación global de crisis económica, que afecta en mayor medida al consumo y que se demuestra en la reducción de los préstamos, que en 2010, crecieron un 0,7% en comparación con junio de 2009. En cambio, los depósitos se dispararon un 6,3% al cierre de los seis primeros meses de 2011, y acumularon 704.216 millones de euros respecto al mismo periodo de 2010, cuando el incremento sólo fue del 0,2%. Los bancos prefieren invertir en el mercado minorista, y más tras la volatilidad que azota los mercados. La cuantía de los depósitos no alcanzó la de los créditos concedidos y la brecha ascendió al total de 149.222 millones de euros, lo que pone de manifiesto que las entidades han recurrido a otra forma de financiación, al margen de los ahorros de sus clientes. Sin embargo, esta diferencia, que supone que el 82% del crédito estuvo cubierto por financiación minorista, es inferior a la de hace un año, cuando el total fue de 188.401 millones de euros, un 77% de los préstamos concedidos por los bancos. En concreto, hasta junio de 2011, la mayor parte de los créditos se concentraron en las seis principales entidades españolas: Santander, BBVA, Banesto, Sabadell, Popular y Bankinter, que aglutinaron el 81,5% del volumen global, siendo el BBVA quien lideraría la lista de saldo crediticio, con 239.384 millones de euros si no se sumara el total del Santander, 174.224 millones, con el de su filial Banesto, 75.031 millones, que aglutinarían un total de 249.255 millones de euros.
En cuanto a los depósitos, el ránking lo lideró el grupo Santander, con 237.477 millones de euros, seguido por el BBVA (195.326 millones), el Popular (87.867 millones), el Sabadell (50.786 millones).

Las tarjetas de débito se encarecen un 18,1%
Los bancos y cajas de ahorros españoles elevaron en agosto las comisiones que cobran a sus clientes por las tarjetas de débito un 18,1% de media, en comparación con el mismo periodo de 2010, y en un 10,3% las de las tarjetas de crédito. Según los datos del Banco de España publicados ayer, la cuota media que pagaban a finales de agosto los clientes por tener una tarjeta de débito alcanzó los 19,89 euros, frente a los 16,84 de un año antes. Con respecto a julio, la comisión media que se pagaba por una tarjeta de crédito no ha variado y continuó en los 19,89 euros. Por su parte, la comisión media de las tarjetas de crédito fue a finales de agosto de 36,93 euros, superior a los 33,48 euros que se pagaba en el mismo mes de 2010. Pese a ello, no todas las entidades aplican los mismos precios a sus clientes, ya que la cuota máxima en las tarjetas de débito alcanzó los 30 euros y la mínima 4,51 euros, y en las de crédito, la comisión máxima alcanzó los 52 euros y la mínima, los 13,52 euros. Continúa siendo gratis disponer de efectivo con una tarjeta de débito en los cajeros de la misma entidad.