Nueva York

Baño de «tops» en Canarias

La Razón
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Triquinis imposibles, biquinis cabareteros y minúsculos bañadores masculinos fueron algunas de las propuestas que se pudieron ver este fin de semana en la pasarela «Moda Cálida» de Gran Canaria. Presentaron sus colecciones de moda baño firmas como Dolores Cortés, Rosa Chá, Guillermina Baeza, Vanity Fair o La Perla. En su XX edición se apostó por echar mano de los «top model» españoles que triunfan en Nueva York y París -Clara Alonso, Marta Español, Jon Kortajarena- y se estrenó recinto para el desfile. En el palacio de congresos de Expomeloneras, al sur de la isla, se instaló una pasarela de vértigo a tres alturas por donde los modelos se movían con soltura -también hubo algún tropezón- para presentar las nuevas colecciones. Jose Toledo fue la encargada de dirigir una velada que inauguró Carlos San Juan y biquins negros con algún toque dorado y olvidando por completo los tirantes para borrar las marcas del bronceado. Más arriesgado, entre el teatro y el cabaret, apareció Carmen González Sosa, que llenó de corsés, encaje y raso unos bañadores un tanto difíciles de sumergir en el agua, pero divertidos y transgresores. La «top» Marta Español abrió la colección de Guillermina Baeza. Sobriedad y elegancia con pamelas de grandes dimensiones que causaron más de un problema a las modelos. «No soy mucho de bañadores, me gusta más el biquini, pero con esta colección estoy cambiando de idea, son estupendos», comentaba Español antes del desfile. Quien levantó gran espectación, con permiso de Ariadne Artiles -su hermana es su clon- y Arantxa Santamaría, fue Jon Kortajarena, que se enfundó los provocadores bañadores ajustados de Rappido. Con un toque de fetichismo policial (las modelos portaban gorras) acompañó sus diseños Arcadio Dominguez, que presentó a una mujer fuerte y decidida. Véase Clara Alonso. La colección de Nuria González paseó lycras hasta los tobillos que emulaban al mundo anfibio, utilizando «la metáfora de la prenda de baño como una segunda piel», según explicó su creadora. La sencillez y discreción marcaron las propuestas de Rosa Chá, que se inspiró en la diva brasileña Elza Soares.