Blanco anuncia que la T-1 entrará en funcionamiento el 16 de junio

barcelona- Sabedor de la fuerza que ha adquirido dentro del Gobierno al frente del Ministerio de Fomento, José Blanco, aterrizó ayer en Cataluña con tres anuncios «bomba» en el maletín. El primero, que el servicio de Cercanías de Renfe quedará en manos de la Generalitat a partir del 1 de enero de 2010, todos lo esperaban. El compromiso con el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, de que en quince días se resolverá la financiación de la estación del AVE en la Sagrera, tampoco sorprendió, porque el Ayuntamiento había dado al Gobierno de plazo hasta mayo para cerrar este asunto. El anuncio menos esperado y quizá el mejor fue que la T-1 del aeropuerto de El Prat abrirá el 16 de junio, a tiempo para la campaña turística de verano.La Generalitat en el El PratBlanco aderezó el anuncio con otro avance, explicó que que en los próximo meses está previsto que en los próximos meses se licite la prolongación de la línea de Cercanías C-10 desde la antigua terminal, hasta la nueva T-1. El ministro de Fomento detalló que este tramo correrá por el subsuelo y que, por lo tanto, se necesitará una tuneladora para tirarlo adelante.Los anuncios de Blanco perdieron color cuando se le preguntó por la participación del gobierno de la Generalitat en el nuevo ente gestor del aeropuerto de El Prat. El titular de Fomento esquivó con poca destreza la cuestión. Una de las principales demandas catalanas es que la Generalitat pueda estar representada en el consorcio encargado de dirigir el aeropuerto de Barcelona, una petición hasta la fecha desatendida por el Gobierno. «Sólo hace un mes que soy ministro, déme tiempo», comentó Blanco, sobre el porvenir de la gestión de los aeropuertos catalanes. «Voy a tratar de conciliar el interés general de Aena con el interés legítimo» del gobierno catalán, aseguró Blanco ante la mirada atenta del presidente Montilla.De momento, la Generalitat deberá contentarse con el compromiso de Fomento para hacer llegar Cercanías a la nueva terminal de El Prat y con el estreno de la T-1. En un intento de hacer olvidar la cuestión sobre la presencia catalana en el futuro consorcio de El Prat, Blanco recordó que la inversión realizada por Aena en la T-1 ha sido de 900 millones de euros. La nueva terminal tiene capacidad para acoger a 30 millones de pasajeros al año. A partir del 16 de junio, acogerá el 80 por ciento del tráfico del aeropuerto de Barcelona. En 2007, AENA asignó los espacios de la T-1 (entonces Terminal Sur) a las alianzas One World y Star Alliance, a Vueling y a otras 17 compañías aéreas que realizaban vuelos intercontinentales pero no vinculados a ninguna alianza. También entraron en el reparto Clickair y Air Nostrum. Un año más tarde, se redistribuyeron los espacios incluyendo en el reparto a la alianza Skyteam.