Alicante

Chacón concede a cinco militares la máxima condecoración en tiempo de paz

La ministra de Defensa, Carme Chacón, ha firmado una orden por la que concede a cinco militares del Ejército de Tierra la Cruz al Mérito Militar con distintivo rojo, la máxima condecoración castrense que puede otorgarse en tiempos de paz en reconocimiento a una acción de combate y que nunca había ratificado un Gobierno español desde que distinguió a los militares que en 2004 lucharon y sobrevivieron a los ataques de la insurgencia durante la misión española en Irak y su repliegue y a los efectivos que el 11 de julio de 2002 participaron en la operación para desalojar a los militares marroquíes del islote de Perejil. Aprobada por Chacón el 9 de marzo, la ordena consta en una resolución del Ministerio publicada el jueves pasado en el Boletín Oficial de Defensa (BOD) y recogida por Europa Press. El texto firmado por la responsable política de los ejércitos dice que las medallas ‘rojas', las primeras otorgadas por Chacón, se conceden "de conformidad con lo dispuesto en el artículo 37 del Reglamento General de Recompensas Militares". Este artículo señala que se distinguirán con la medalla roja tres tipos de "acciones, hechos o servicios". Así, se reconocerán los actos de servicio que, "acreditando valor", "pongan de manifiesto dotes significadas de mando, serenidad o iniciativa frente a fuerzas hostiles o que traten de impedir el cumplimiento de la misión encomendada". Se distinguirán igualmente los hechos que "impliquen", "acreditando valor, "una acertada dirección o empleo de las fuerzas propias en el desarrollo de la operación armada, así como el inteligente y eficaz cumplimiento de la misión encomendada". El tercer supuesto que contempla el citado artículo del Reglamento de Recompensas para las cruces rojas no es aplicable a los cinco militares del Ejército de Tierra condecorados por Chacón, toda vez que se refiere a soldados, suboficiales y oficiales fallecidos "en acto de servicio". Los cinco militares del Ejército de Tierra condecorados por el actual Gobierno por sus méritos profesionales durante una acción de combate son el comandante José Ignacio Valverde Moreno, los capitanes Ignacio García del Castillo y Javier Gonzaga Ríos Blanco y los sargentos primeros Octavio Boo Viz e Israel Rodríguez Miranda. UN BOINA VERDE, UN LEGIONARIO Y TRES MILITARES DEL MANDO DE CANARIASFuentes militares aseguraron que el comandante Valverde Moreno es un oficial procedente del Mando de Operaciones del Ejército de Tierra (MOE), la unidad de élite con sede en Alicante y cuyos ‘boinas verdes' fueron los primeros en pisar el islote de Perejil para desalojar sin un solo disparo a los militares marroquíes que lo ocupaban y colocar la bandera española en el rocoso emplazamiento. El capitán Gonzaga Ríos pertenece a la Brigada de la Legión (BRILEG), otra de las unidades de Tierra con mayor experiencia y éxito acumulado en todas las operaciones de mantenimiento de la paz protagonizadas por las Fuerzas Armadas en el Exterior. Esta unidad fue la primera que se desplegó en los Balcanes para proteger a personal civil durante la guerra de Bosnia Herzegovina. El capitán García del Castillo y los sargentos primeros Octavio Boo e Israel Rodríguez Miranda pertenecen a la Jefatura de Tropas del Mando de Canarias, concretamente a su Regimiento con sede en Tenerife y a una de sus agrupaciones de apoyo logístico. Los cinco militares españoles estuvieron desplegados desde noviembre de 2007 en Afganistán como componente de la XVIII Agrupación Táctica española (ASPFOR XVIII), liderada por el Mando de Canarias con el coronel Honorio López Davadillo. Otras fuentes militares consultadas apuntaron que los cinco militares formaron parte de la compañía española de la Fuerza de Reacción Rápida (QRF) de la Base de Apoyo Avanzado (FSB) de Herat. El hecho de que los cinco militares protagonizaran la acción de combate en el despliegue liderado por la Jefatura de Tropas de Canarias implica que los hechos se produjeron entre noviembre de 2007 y marzo de 2008, cuando el ministro de Defensa era el actual portavoz socialista en el Congreso, José Antonio Alonso. En ese periodo, Defensa informó de tres hechos protagonizados por la Fuerza de Reacción Rápida española (QRF, por sus siglas en inglés) de la Base de Herat. En primer lugar, el 28 de noviembre uno de los portavoces oficiales de Defensa indicó que las Fuerzas Armadas españolas habían apoyado al Ejército Nacional Afgano (ANA) para repeler un ataque insurgente con fuego de mortero y armas ligeras contra una comisaría del Distrito de Gullistán, en la provincia de Farah. El 3 de diciembre, el Departamento dirigido por José Antonio Alonso informó de que, el 30 de noviembre, las tropas españolas defendieron a una unidad del Ejército afgano cuando fue atacada por la insurgencia a su paso por el mismo distrito, Gullistán, en la misma provincia. Los militares pertenecían a la misma compañía española de la QRF de la base de Herat. El último de los enfrentamientos registrados durante el despliegue del Mando de Canarias en Afganistán se produjo el 10 de diciembre de 2007 y se saldó con la muerte de un civil afgano por un disparo de bala realizado por las tropas españolas. Según informó entonces el Ministerio de Defensa, las tropas españolas abrieron fuego con dirección al aire y al suelo cuando un vehículo se aproximó a su convoy militar desatendiendo las órdenes para que se detuviera. Esos últimos hechos se produjeron el 10 de diciembre a las 16.00 horas en la carretera de Farah-Rud, en la provincia de Farah, la que más atentados y actividad talibán registra de la zona oeste, en la que están desplegadas las tropas españolas. La compañía española y las dos compañías italianas de la Fuerza de Reacción Rápida de la Base de Herat constituyen la primera fuerza militar que se despliega en cualquier punto de las cuatro provincias de la zona occidental afgana (Ghor, Badghis, Herat y Farah) para auxiliar en misiones de seguridad a los contingentes con base permanente en esas regiones y que lideran los correspondientes Equipos de Reconstrucción Provincial (PRT). EL VALOR "RECONOCIDO"Los cinco militares del contingente del Mando de Canarias distinguidos por el Gobierno tras una largo y complejo proceso administrativo son reconocidos por las acciones "muy meritorias"que realizaron en el país asiáticos. Aseguraron además que el hecho de que se les entregue la Cruz al Mérito Militar con distintito rojo les sitúa como militares con el "valor reconocido", según reza el propio Reglamento de Recompensas. Este apartado reglamentario señala textualmente que "las Cruces del Mérito Militar, del Mérito Naval y del Mérito Aeronáutico, con distintivo rojo, se concederán a aquellas personas que, con valor, hayan realizado acciones, hechos o servicios eficaces en el transcurso de un conflicto armado o de operaciones militares que impliquen o puedan implicar el uso de fuerza armada, y que conlleven unas dotes militares o de mando significativas". Las mismas fuentes recuerdan que a todo militar, desde el comienzo de su vida castrense, el valor "se le supone". Tras la concesión de esta medalla, "el valor"de estos cinco suboficiales y oficiales está "reconocido"de facto por el Gobierno y por las Fuerzas Armadas españolas. La Cruz al Mérito Militar es la máxima condecoración castrense que puede imponerse en tiempos de paz por una acción de combate. Las medallas de mayor valor, como la Laureada de San Fernando, la Cruz de Guerra o las Medallas del Ejército, la Naval y la Aeronáutica distinguen acciones en tiempos de guerra declarada oficialmente.