Conservadores se perfilan vencedores legislativas pero carecen de mayoría

La coalición conservadora del primer ministro, Sali Berisha, se perfila como la vencedora de las elecciones de Albania al lograr el 46,81 por ciento de los votos, aunque carece de una mayoría suficiente para formar Gobierno.

La Comisión Electoral Central informó hoy de que con el escrutinio del 98,2 por ciento de los votos, la oposición socialista obtiene el 45,42 por ciento de los votos.En tercer lugar se sitúa el Movimiento Socialista para la Integración (LSI) del ex primer ministro Ilir Meta con el 5,59 por ciento de los votos, con lo que el centro-izquierda obtendría una mayoría porcentual de lograr una alianza con el PS.

Con estos datos el Partido Demócrata (PD) de Berisha lograría 68 escaños de los 140 del Parlamento albanés, mientras que los socialistas (PS) obtendrían 65 diputados. Si se agregan los aliados de ambos bloques la Cámara estaría dividida en dos, con los conservadores en posesión de 70 diputados y el centro-izquierda con otros 70 escaños.

El PD ya ha anunciado que espera dirigir el país en la próxima legislatura y se ha proclamado ganador las elecciones. "No hay duda de que la coalición de derechas dirigirá el país los próximos cuatro años. Calculamos tener 71 diputados", declaró Majlinda Bregu, portavoz del PD, a los periodistas.

El recuento de los votos lleva dos días de retraso sobre la fecha en la que se pretendía anunciar oficialmente el resultado, el lunes a las 17.00 hora local (15.00 GMT). Por el momento, el proceso de recuento de las papeletas restantes está detenido en varios centros de escrutinio y el PS y el PD se acusan mutuamente de tratar de manipular el escrutinio. Unos 3,1 millones de electores estaban convocados el domingo para elegir 140 diputados entre los 4.853 candidatos de 34 partidos políticos y 4 coaliciones.

Los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) destacaron que la jornada electoral se desarrolló sin incidentes violentos, aunque lamentaron la persistencia de algunas irregularidades. La Unión Europea (UE) considera estas elecciones como una prueba crucial de la madurez democrática del pequeño y pobre país balcánico. Albania solicitó oficialmente entrar en la UE en abril pasado, el mismo mes en que se adhirió a la OTAN.